¡La gran comisión! – Parte X – Bosquejo

¡LA GRAN COMISIÓN! (X)

HECHOS 8: 36-40

INTRODUCCIÓN: en esta oportunidad estudiaremos otros pasos para la evangelización efectiva y productiva. También nos basaremos en este pasaje bíblico, donde Felipe el evangelista está compartiendo el mensaje al etíope y  lo aprendido en Cipep. Veámoslo:

1. TRATAR UN PASO ABIERTO DE COMPROMISO (Vr. 36-38)

• ¿Cuál fue el paso que dio el etíope después de creer en Jesús? (vr. 36-38).
• ¿Que logró Felipe en este encuentro con el etíope?
• ¿Qué dijo el etíope que demuestra esto?
• ¿Qué acto abierto tomó para comprometerse como discípulo del Señor? (vr. 36-38)
• ¿Quién lo bautizó después de confesar que Jesús es el hijo de Dios? (vr. 38)

Tengamos claro que uno de los propósito de la evangelización es “ganar las almas”, que la persona se convierta, siga los caminos del Señor y se bautice. Así lo enseñó Jesucristo cuando encomendó la gran comisión (Marcos 16: 15, 16). Antes que me censuren diciendo que nosotros no ganamos almas (que es una arrogancia decirlo), escudriñe las siguientes citas bíblicas y saque sus propias conclusiones (Mateo 18: 15; Proverbios 11: 30; Romanos 10: 14, 15; 1 Corintios 9: 19; 1 Pedro 3: 1)

Cuando la persona (el evangelizado) convencido por el Espíritu Santo se arrepiente y llega a los pies del Señor, significa que se ha logrado llevarlo a un paso abierto de compromiso y para esto hay que extenderle un llamado al terminar de explicarle el mensaje y enfatizarle claramente lo que esa decisión implica.

2. LLEVAR A LA PERSONA A UNA RELACIÓN CON CRISTO MÁS QUE CON UNO MISMO (Vr.  39)

• ¿Quién arrebató a Felipe el Evangelista? (vr. 39^a)
• ¿Siguió viendo el etíope a Felipe el Evangelista? (vr. 39^b)
• ¿Cómo siguió el etíope su camino después que Felipe el Evangelista fue arrebatado? (vr. 39^c)
• ¿Cómo sabemos que el etíope no dependía de Felipe el Evangelista? (vr. 39)

Existe la tendencia de llevar al nuevo creyente a una dependencia total de nosotros, del pastor e iglesia, porque no le enseña a depender de Dios; de allí que algunas veces el nuevo converso no persevera (no siempre) y le hacemos así un daño (aunque usted no lo crea). ¡Que aprenda a depender y a confiar totalmente en Dios! Aunque esto no significa que lo vamos a dejar solo. ¡Toca discipularlo y también soltarlo al ruedo! ¿Hoy como logramos que el nuevo creyente no dependa del hombre sino de Dios? (Mateo 28: 19-20)

CONCLUSIÓN: estos pasos sencillos, fundamentales y básicos para algunos, pero de mucha importancia nos ayudarán a realizar la gran comisión y la obra evangelizadora con éxito, eficacia y resultados positivos (frutos). Recuerde que hay una corona para los que anuncian el evangelio y “ganan almas”: la corona de gozo (Filipenses 4: 1; 1 Tesalonicenses 2: 19, 20).

Esta corona (premio) corresponde a los que “ganan almas” y será de tal naturaleza que los que la reciban se gloriarán y se regocijarán. De hecho el apóstol Pablo la reclamaba para sí en relación con los grupos de creyentes a quienes él había “ganado” y había hecho discípulos de Jesucristo: los filipenses (Filipos) y los tesalonicenses (Tesalónica). Además los que “ganan” almas son sabios (Proverbios 11: 30). ¡AMÉN QUE SÍ!”

Autor: PrediCantor Garys Leandro

Preparado para: www.destellodesugloria.org