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La importancia de congregarnos – Parte 3 de 5

La importancia de congregarnos – Parte 3 de 5

admin febrero 05, 2019 Bosquejos, Enseñanzas, Predicaciones, Sermones 0 Comentarios

¡LA IMPORTANCIA DE CONGREGARNOS! (III)

1 SAMUEL 1: 4, 5

INTRODUCCIÓN: en esta tercera (3ra) entrega, nos concentraremos una vez más en este pasaje bíblico y en Elcana, para explicar un poco de la importancia de congregarnos, con las manos llenas (la ofrenda). Veamos los hechos:

1. ELCANA DABA A PENINA LA PARTE QUE LE CORRESPONDÍA (Vr. 4a)
2. IGUALMENTE LO HACÍA CON CADA UNO DE SUS HIJOS E HIJAS (Vr. 4b)
3. TAMBIÉN CON SU ESPOSA ANA DÁNDOLE UNA PARTE ESCOGIDA (Vr. 5)

Escogida (hb. Af): la mejor parte, la ración más escogida, una porción o preferencia especial (de primera y selecto), una “doble” porción tratándola como si tuviera hijos (aunque no los tenía) a quien le correspondía la otra parte (proféticamente).

Analicemos la secuencia y los hechos concretos:

En los “sacrificios de paz” el “ofréndate y adorador” llegaba con la víctima o animalito (perfecto, limpio, sin defecto, puro).
El substituto lo tomaba de sus rebaños o manadas (becerros, ovejas, toros, chivos).
Se lo “entregaba” al sacerdote para el “sacrificio” acostumbrado de reconciliación (no podía hacerlo directamente el ofréndate).
Después se apartaba una “porción considerable” para el adorador u ofréndate (después que el sacerdote lo ofrecía a Dios).
Esta debía ser “comida” en la tienda de reunión en la Presencia del Señor, junto con su familia y amigos (1 Samuel 1: 7-9; Levítico 3: 7; 19: 5, 6; Deuteronomio 12: 7, 12, 17,18).

Ana también se presentó con “las manos llenas” (tres becerros o un becerro de tres años), cuando fue a cumplirle la promesa al Señor y “dedicarle” su hijo: Samuel (vr. 24-28)

CONCLUSIÓN: ¿y nosotros hoy también nos congregamos con las manos llenas (ofrendas, diezmo y primicias? “MOISÉS” también había entendido esta gran verdad cuando le dijo al Faraón: “con nuestras ovejas y con nuestras vacas hemos de ir (a servir, adorar, rendir culto, honrar a Dios); porque es nuestra fiesta solemne para Jehová” (Éxodo 10: 9b).

“Entonces Faraón hizo llamar a Moisés, y dijo: Id, servid a Jehová; solamente queden vuestras ovejas y vuestras vacas; vayan también vuestros niños con vosotros.

Y Moisés respondió: Tú también nos darás sacrificios y holocaustos que sacrifiquemos para Jehová nuestro Dios…

Nuestros ganados irán también con nosotros; no quedará ni una pezuña; porque de ellos hemos de tomar para servir a Jehová nuestro Dios, y no sabemos con qué hemos de servir a Jehová hasta que lleguemos allá (Éxodo 10: 24-26).

Igualmente los “MAGOS” también se presentaron con “las manos llenas” (presentes), delante del Rey que había nacido, cuando lo adoraron (Mateo 2: 11).

En los tiempos bíblicos hasta el “PROFETA” le “llevaban algún presente” cuando lo consultaban (1 Samuel 9: 3-9; 2 Reyes 4: 42-44). ¿Y qué decir de ciertas actividades sociales: cumpleaños, aniversarios, grados? ¿Y para Dios creador y dueño de toda las cosas?

Además la Biblia es clara en decir en relación con la fiestas solemnes: “ninguno se presentará delante de Dios con las manos vacías” (Éxodo 23: 15; 34: 20; Deuteronomio 16: 16).