¡Jericó la inconquistable! – Bosquejos
¡JERICÓ LA INCONQUISTABLE!
“Jericó estaba CERRADA, bien cerrada, a causa de los hijos de Israel: NADIE entraba, ni salía” (Josué 6: 1)
INTRODUCCIÓN: ¿por qué Jericó era la ciudad inconquistable? Analicemos dos razones:
1. POR LAS PRECAUCIONES QUE ELLOS TOMARON
A. Cerraron bien pero muy bien a Jericó (vr. 1a)
- Significa que las “ENTRADAS” y sobre todo las “PUERTAS” de la ciudad de Jericó estaban bien fortificadas, bien aseguradas (NVI), bien cerradas a cal y canto (según el hebreo) por los residentes y los pobladores de la campiña cercana.
También hacía referencia al “PORTÓN” que estaba totalmente vigilado: “El portón de la ciudad de Jericó se cerró y quedó bajo vigilancia para que no entraran los israelitas” (TLA)
- A “CAUSA” o por “TEMOR” a los hijos de Israel (vr. 1b)
El “miedo” se apoderó de ellos desde el momento que habían descubierto a los dos espías israelitas que Josué había mandado para explorar la tierra (Josué 2: 1-13)
Desde ese momento los hombres del rey de Jericó empezaron a tomar las precauciones y medidas respectivas y necesarias: “cerrar el portón” (Josué 2: 5-7) (TLA)
- Ellos ya sabían que Israel “VENÍA” por Jericó, que ya lo “TENÍAN” en la mira
- Ellos también sabían que los israelitas ya habían “CONQUISTADO” algunos pueblos al otro lado del Jordán y por ende “DERROTADO” a dos reyes amorreos: “Sehón y Og” (Josué 2: 9, 10; 24: 12)
- Ellos igualmente sabían que Dios había “SACADO” a Su pueblo de Egipto y “SECADO” el Mar Rojo (Josué 2: 9, 10)
- Ellos también sabían cómo ya habían CRUZADO EL JORDÁN al Dios dividirlo (Josué 3: 1-17; 24: 11)
B. No permitieron la entrada ni la salida de ninguna persona (vr. 1b)
- Era como especie de un TOQUE de queda
- Obstaculizar e IMPEDIR la entrada a la tierra
- Hacer de la conquista algo IMPOSIBLE: ¡Pero para Dios no!
Era la manera de PREPARARSE para el combate, la forma lógica y humanamente previsible ante estas circunstancias (esperando la iniciativa del que llegaba)
- Estaban ATRINCHERADOS para repeler cualquier ataque e IMPEDIR la entrada del pueblo de Israel. Nadie salió para desertar ni para entablar negociaciones de paz y nadie fue admitido para ofrecer esas negociaciones. Sin embargo; el Pueblo de Dios entró y tomó la ciudad (Josué 6: 5, 20)
REFLEXIÓN: aun lo que está cerrado bien cerrado se puede conquistar en el nombre del Señor. ¡Él es experto en abrir! En la Biblia encontramos que Dios abrió puertas, ventanas, ríos, caminos, mares (Génesis 7: 16; Éxodo14: 21, 22, 29; Salmos 77: 19; Isaías 43: 16; 51: 10; 60: 11; Malaquías 3: 10).
¡Cuando Dios abre nadie puede cerrar! (Isaías 22: 22; Apocalipsis 3: 7). ¿Por qué no abrir lo que hoy está cerrado, si Él es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos? (Hebreos 13: 8)
2. POR LAS MURALLAS O LOS MUROS QUE HABÍAN
A. Jericó era una de las ciudades más amuralladas (vr. 5, 20)
- Dios SABÍA perfectamente que Jericó estaba FUERTEMENTE amurallada y por eso HABLÓ con toda autoridad de ellas y de lo que pasaría o SUDARÍA en su momento con esos muros: derrumbarse (vr. 5, 20)
¡De hecho era verdad que la ciudad estaba RODEADA de muros fortificados que le daban mucho dominio!
- Sus murallas eran las más altas, FUERTES, con muros y antemuros (muros dobles). Los muros abarcaban hasta 3 o 4 hectáreas de terreno, 8 o 10 metros de largo, 6 metros de ancho. Los muros los separaban 5 metros y los UNÍAN las casas que construían arriba.
Aun los ladrillos tenían 10 metros de ancho, 30 o 60 de largo, la base de 4 hileras de piedra
- Por ser amuralladas Jericó era “SEGURA” que mucha gente de otros pueblos venían a vivir en los alrededores de la ciudad, refugiándose tras las murallas y temiendo luchar con Israel. ¡La ciudad era un “SÍMBOLO” de poder, fuerza militar, confianza!
Aun los soldados que montaban guardia encima de los muros podían observar muchos kilómetros a la redonda.
B. Su confianza estaba en la “fortaleza” de sus murallas (vr. 5, 20)
- Según ellos Jericó estaba “PROTEGIDA” por los dioses de los cananeos.
Sin embargo; la conquista (la toma) de Jericó DEMOSTRÓ que el Dios de Israel era SUPERIOR a ellos. Por lo tanto era inevitable la derrota de los cananeos
- Precisamente por sus murallas bien FORTIFICADAS era considerada la ciudad “impenetrable, invencible, indestructible e INCONQUISTABLE”.
¡Para los cananeos Jericó nunca sería DOMINADA, mucho menos por el pueblo de Dios! ¡Hasta el día que Israel entró y la CONQUISTÓ! (vr. 20)
REFLEXIÓN: aun lo inconquistable se puede conquistar en el nombre del Señor (Números 13: 27-33 [vr. 30, 31]; Ester 2: 15-18; Daniel 2: 49; 6: 1-3,28; Marcos 9: 23; Juan 11: 40).
CONCLUSIÒN: después de haber explicado esta Palabra, termino preguntando: ¿si es posible conquistar el Jericó de hoy, por muy difícil, imposible e inconquistable que sea (humanamente hablando)? ¡Lo cierto es que para Dios nada es difícil ni tampoco imposible! (Génesis 18: 14; Lucas 1: 37; 18: 27).
¡AMÈN QUE SÌ! ¡MANOS A LA OBRA!
Autor: PrediCantor Garys Leandro
Preparado para: www.destellodesugloria.org