El Ofrecimiento
EL OFRECIMIENTO
“14por eso, ahora voy a seducirla: me la llevaré al desierto y le hablaré con ternura. 15Allí le devolveré sus viñedos, y convertiré el valle de la Desgracia en el paso de la Esperanza. Allí me corresponderá, como en los días de su juventud, como en el día en que salió de Egipto 19Yo te haré mi esposa para siempre y te daré como dote el Derecho, y la Justicia, el Amor y la Compasión. 20Te daré como dote Mi fidelidad, y entonces conocerás al Señor” NVI
Dios le habla a su pueblo amado por medio del profeta Oseas y le recuerda todo lo malo que ha hecho ante sus ojos, la forma en que Israel le rinde culto a dioses ajenos, quemando incienso, levantando altares, realizando peregrinaciones a ciudades paganas, etc. El pueblo se ha olvidado de su Dios, el que lo liberó de la esclavitud, el que le proporciona el alimento, el que los cuida; este pueblo amnésico no ha valorado ni reconoce los milagros que el Señor ha realizado por ellos. Sin embargo, el amor de Dios es inmenso y les da una más de tantas oportunidades para que se arrepientan y se vuelvan de sus malos caminos; el plan o estrategia de Dios ahora es la seducción, apartará a su pueblo llevándolo al desierto y les hablará con ternura, devolviéndoles sus propiedades y riquezas, pasando de un estado lamentoso (desgracia) a otro de alegría (esperanza), creando un vínculo de amor esposo-esposa y entregándole una dote celestial.
Mi amado(a) cuando iniciamos nuestro caminar en el Señor todo es felicidad, sentimos paz en nuestra alma, nuestro corazón es como una copa rebosante de amor, la vida cobra un nuevo sentido y aún los problemas más difíciles los vemos como cosas sin importancia. Nace un deseo ferviente por la palabra y la oración, nuestros labios están llenos de alabanza y sentimos la presencia del Espíritu Santo fluir dentro de nosotros como un río impetuoso a punto de desbordarse, a todo el mundo queremos hablarle de lo que está pasando en nuestro interior y decirles lo que Cristo Jesús ha hecho en nuestras vidas. Este es el PRIMER AMOR, el cual no debe morir jamás, por el contrario debemos de alimentarlo con los leños de confianza, esperanza y Fe, procurando avivar este fuego con el fuego santo que es el Espíritu de Dios.
Dios quiere hacerte un ofrecimiento hoy; Él quiere transformar tu estado de desgracia y llevarte a una tierra de Esperanza; que tu lamento se convierta en gozo, que tus días oscuros terminen para que den paso a la luz resplandeciente de la promesa de Dios para tu vida. En este día permíteme cambiarte el nombre(como te llames) y llamarte Zaqueo y al igual que a él decirte que Hoy la salvación ha venido a tu casa, que no te angusties por lo que estás pasando, que el Señor ya se entregó en sacrificio por ti y los tuyos, que si te has olvidado de Dios, este es el momento de retornar a la senda correcta, de levantar una plegaria al Señor de Señores y pedir perdón por todos tus pecados, de reconocer que sin Él (Jesús) no eres absolutamente nada, que todo lo que has hecho es vano, que en tu corazón has levantado un altar ajeno y pedirle al Espíritu Santo que lo derribe para que levantes el altar genuino, el altar de poder, de gloria.
El Señor quiere devolverte lo que Satanás te ha quitado, ya sea tu familia, tu trabajo, tus finanzas, tus hijos, tu pareja, tu hogar, tu paz, tu gozo, el ministerio que Dios puso en tus manos, en fin, lo que te haya arrebatado hoy te lo quiere reintegrar. Déjate seducir por el Dios de la Gloria y llevar al desierto; no temas porque Él siempre estará a tu lado y en los momentos en que sientas que flaqueas, Él te dará la fortaleza para continuar hasta alcanzar la victoria.
Cuando hablamos de desiertos, inmediatamente vienen a nuestra mente la soledad, las pruebas, los sacrificios, las angustias, las carencias, e incluso la imagen de muerte, y esto nos causa temor y nuestra naturaleza nos mete en un estado de debilidad angustiante; pero cuando nuestra FE está puesta en Cristo Jesús, todo esto no debe preocuparnos ya que nuestra victoria está asegurada en Él.
Hoy, Él Señor te pide que le ames con todas tus fuerzas, con toda tu alma, con toda tu mente y con todo tu corazón, que confíes en Él, y le seas Fiel. A cambio te ofrece estar unido a ti como un esposo a su esposa y te da una dote preciosa la más importante: SU FIDELIDAD.
Porque Dios es fiel en cumplir todas sus promesas.
Solamente así podrás conocer al Señor tu Dios. A Él sea toda la gloria.
Repite conmigo esta oración:
Señor: hoy mi alma anhela conocerte más, te suplico me ayudes a permanecer firme en tu palabra en los momentos más difíciles por los que haya de pasar, confiando en que TÚ me sustentarás con tu mano poderosa y tu luz de sabiduría ilumine mi mente para tomar las decisiones correctas en mi vida. Ayúdame a serte fiel; que mi FE no sea quebrantada, sino que sea cada día fortalecida. No te pido nada Mi Señor, solamente déjame amarte y servirte con todo mi ser. Amén
Autor: Victor Culebro
Realmente puedo escuchar la voz del Señor hablandome con ternura en medio del desierto. Pues hoy EL trajo a mi memoria esas palabras, esa promesa que ya había olvidado. Dios es realmente fiel… paciente, bueno, misericordioso. ALABADO SEA SU SANTO NOMBRE. Yo creo que El quiere devolverme lo que el enemigo me quitó. Yo recibo esa palabra en el nombre de Jesús.