El chisme, ¿libera el estrés?
El chisme, ¿libera el estrés?
En un curso extracurricular, fuera de las acciones de formación propias de la universidad el cual tome por decisión propia, para fortalecer y crear nuevas destrezas, me tope con un debate un poco diferente, en el libro de apoyo del mismo y según las indicaciones del profesor, el grupo de estudiantes debíamos discutir sobre la importancia del chisme, el cual según algunos estudios demostraban que eran momentos necesarios para liberar estrés, Según el investigador Willer: “cuando somos testigo de la mala actitud de una persona, nos sentimos frustrados y al ser capaces de contar el hecho a otros, nos sentimos mejor. De esta manera, explica, se mantiene el orden social”.
Lo cierto es que no necesitamos un grupo de estudiantes o alguna universidad que realice algún tipo de análisis, solo necesitamos sentido común para saber que el chisme es una arma de fuego destructiva y aun si nuestro sentido común nos falla, nuestro manual de vida (la biblia) nos instruye sobre esto: Así también la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí, !!cuán grande bosque enciende un pequeño fuego! Santiago 3:5 (Versión Reina Valera 1960). El hablar de otros tiene mucho que ver con las inseguridades y la necesidad de hablar sobre las fallas y conductas impropias de otros para calmar frustraciones, defectos propios, y algunas situaciones que avergüencen, el hablar mal de otros es una prueba sobre la dificultad que se nos presenta en admitir y examinar nuestras propias fallas, entonces nos fijamos en las faltas de los demás para desviar nuestra mirada del verdadero problema personal.
Debemos tener en cuenta lo mal que significa el hablar de otros sin ningún tipo de escrúpulos, sembrando disensiones y posibles contiendas, Sin leña se apaga el fuego; sin chismes se acaba el pleito Proverbios 26:20 (Nueva Versión Internacional), debemos cuidar toda palabra que salga de nuestra boca, procurando que sea en verdad y en sano juicio como nos invita El Señor en su palabra, No juzguéis según las apariencias, sino juzgad con justo juicio Juan 7:24 (Versión Reina Valera 1960), buscando siempre el bienestar de los hermanos y de la iglesia, si vamos a hablar con algún directivo o líder de la iglesia sobre el posible mal comportamiento de algún hermano, que sea comprobado, pero evitemos los prejuicios levantados por nuestros ojos carnales, los cuales con una limitada visión solo ven lo superficial.
No le demos ventaja a Satanás de sembrar diferencias entre nosotros mismos, seamos conscientes del daño que podemos crear a la iglesia de Cristo, y el mal testimonio que damos al hablar sobre otros sin cautela alguna.
Más evita profanas y vanas palabrerías, porque conducirán más y más a la impiedad
2 Timoteo 2:16 (Versión Reina Valera 1960).
Autora: Marianny I. Gutiérrez
Escrito para www.destellodesugloria.org