Reflexión Corta: No cometerás adulterio
Un Destellito En Las Manos De Dios
En ediciones anteriores, señala Destellito, el lector ha aprendido sobre los Diez Mandamientos, los cuales fueron resumidos en dos por el Señor Jesucristo: Jesús le respondió: el primer mandamiento de todos es: Oye, Israel; el Señor nuestro Dios, el Señor uno es. Y amarás al Señor con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que estos. Marcos 12: 39-31, por lo tanto, es posible, referente a los diez, examinarlos uno a uno.
No Cometerás Adulterio
Hace muchos años un rey de un país de Oriente, temeroso de Dios, se dejó seducir por maniobra de Satanás. Era un buen rey y era amado por su pueblo, tenía, dentro de otros atributos, la habilidad para crear música que se entonaba, en muchas ocasiones, en los servicios dedicados al Señor, era hábil en tocar el arpa. Cierto día, estando en alto, observó a una joven hermosa que se bañaba en su casa, sus ojos la miraron y decidió tomarla para sí. La mujer estaba casada. Usando de artimañas y mentiras determinó la muerte del marido para así tener el camino libre para unirse a ella. Esta acción trajo duras y terribles consecuencias para el rey, algunas trascendieron a su tiempo, y debió luchar mucho para conseguir el perdón de Dios, dijo Destellito al momento de abrir su Biblia.
Más el que comete adulterio es falto de entendimiento; corrompe su alma el que tal hace. Proverbios 6:32. Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón. Mateo 5:27,28.
Es poderosa esta tentación, señala Destellito. No discrimina a nadie, se mueve en todos los niveles de la sociedad y el daño que produce es enorme, a diario llega información por los medios de asesinatos que se comenten a causa del pecado de adulterio. El rey de la historia, uso todo su poder de gobierno para darle validez a su relación adúltera, ordenando la muerte del esposo de la mujer en el frente de batalla. Es de tanta gravedad que el Señor Jesús reveló el origen de la tentación, la que está en los ojos de la persona humana. Esa maldad entra por los ojos. Es muy importante que los hijos y las hijas de Dios, estén alertas frente a esta tentación, si sus ojos retienen o miran demás a una figura femenina o masculina, el pecado está a la puerta, expresa Destellito.-
Autor: Oscar Olivares Dondero
Escrito para: www.destellodesugloria.org
