Leyenda de los tres árboles
Leyenda de los tres árboles
“«Mis pensamientos no se parecen en nada a sus pensamientos —dice el Señor—. Y mis caminos están muy por encima de lo que pudieran imaginarse.Pues así como los cielos están más altos que la tierra, así mis caminos están más altos que sus caminos y mis pensamientos, más altos que sus pensamientos.”
Isaías 55:8-9 Nueva Traducción Viviente.
Cuenta la leyenda que existían tres árboles. El primero de ellos era un olivo que soñaba algún día convertirse en un cofre adornado de piedras preciosas y contener un gran tesoro. El segundo era un robre muy fuerte, por ello quería convertirse en la embarcación más imponente que había existido. Y el tercero era un pino que quería convertirse en el árbol más alto del mundo para que cuando la creación le mirase ésta exaltara el nombre de DIOS.
Cuando el primer árbol estuvo maduro un talador le cortó con un hacha, lo cual le causó gran dolor. —Si él realmente quería contener un tesoro tendría que pasar por eso. Para su sorpresa no fue llevado a un palacio en forma de madera para convertirse en un cofre, sino a un humilde pueblo donde fue transformado en un pesebre.
El segundo árbol, el roble, también fue talado. Y como le soñó un constructor de barcos le comenzó a dar forma de embarcación. Pero, cuando fue terminado se dio cuenta que no era de gran tamaño, tampoco fue diseñada para navegar por los mares; sino para lagos.
El pino con el tiempo creció y se convirtió en el más alto de la tierra. Pero una noche durante una tormenta fue impactado por un rayo y éste cayó al suelo, así como su sueño. Pasó el tiempo y fue llevado a un lugar donde se ponían los desperdicios. Después de haber sido el más alto se amargó al convertirse en un desperdicio.
Cuando estos árboles vieron sus anhelos morir o ser despedazados, DIOS cumplió su propósito en ellos. El primer árbol que se había convertido en pesebre una noche recibió no solamente un tesoro en sí sino el más grande tesoro de todos los tiempos: Jesús. Él árbol anhelaba ser cubierto de joyas pero DIOS lo cubrió de Su gloria. El segundo árbol que se convirtió en una embarcación un día enfrentó una gran tempestad en el mar de Galilea, y éste no se hundió. Su fuerte composición resistió no solo las olas y viento que le azotaban sino la gloria de DIOS. Además de que fue testigo de cómo el Hijo de DIOS ordenó a la tormenta que se detuviera.
Y de aquel tercer árbol que a los ojos de muchos se convirtió en desperdicio, un día cercano a la Pascua judía fue tomado por unos trabajadores romanos para que fuese la materia prima de una Cruz en la que sería sacrificado el Hijo de DIOS. A los tres días aquel hombre resucitó y aquel árbol se convirtió en la Cruz que muestra al mundo la grandeza y amor de DIOS. Y cuando la creación le mira ésta exalta el nombre de DIOS.
Si así como estos árboles tus sueños no se han cumplido y pareciera que están muy lejos de cumplirse; o en la búsqueda de esos anhelos que sabes fueron depositados por DIOS has sufrido golpes en el alma, hoy debes entender que tus sueños son mucho más pequeños que los de DIOS. Y que Sus pensamientos están muy por encima de los tuyos. Ese sueño que arde en tu alma es la esencia del plan de DIOS para tu vida, no te des por vencido porque ciertamente ocurrirá y será mucho mejor de cómo lo imaginaste.
Ríndete a los sueños del Señor y así serás portador de toda su gloria.
Escrito por: Richy Esparza
Para: www.devocionaldiario.com y destellodesugloria.org
Escrito basado en la película animada “The Legend of Three Trees” de Hal Holbrook y Roy Wilson
que hermosa historia muy linda
Gracias por tremenda historia.
Dios les bendiga siempre, es para mi una satisfaccion el poder ser portador de estos mensajes que traen a mi vida una enseñanza tan pura de manera que Dios todopodroso desea ser reconocido por todos y depender de el gracias por esta enseñanza.