Destellito: Es posible estar en pie
Un Destellito en las manos de Dios
Diariamente Destellito se asombra por las noticias que constantemente publican los medios escritos, radiales, o de televisión. La mayoría de ellas son de carácter violento, otras calamitosas, y también de desgracias que afectan a las personas, entre otras informaciones.
Y buscando por aquí y por allá algo que pudiera servirle para entregar alguna enseñanza, Destellito se topó con la siguiente noticia:
Ésta tiene como centro el gran terremoto y tsunami que afectó recientemente a Japón. En esa catástrofe murieron aproximadamente veinte mil personas de todas las edades, miles de heridos, y muchos desaparecidos.
En Japón, existe la ciudad de Rikuzentakata, la que se encuentra a unos cuatrocientos kilómetros de la capital. La costa de ésta ciudad fue arrasada por las olas dejando un saldo de destrucción y muerte. Sin embargo, dijo Destellito, quedó algo que llenó de esperanza a mucha gente.
Es Posible Estar En Pie
Las olas llegaron a un hermoso y frondoso bosque que era orgullo de la ciudad, y arrancaron de raíz setenta mil árboles que no tuvieron ninguna oportunidad de sobrevivir. Cuando las aguas bajaron, un desolador panorama quedó a la vista de todos. Pero los corazones desfallecidos de muchas personas recobraron las fuerzas para volverse a levantar, cuando observaron con asombro que un solitario pino había quedado en pie, había desafiado las olas embravecidas, y se mantuvo firme en su lugar, desde aquél día fue llamado “el pino milagroso”. Los entendidos hicieron todo lo posible por preservarlo, pero la sal había dañado sus raíces, y sobrevivió dieciocho meses, dijo Destellito, que tomando su Biblia leyó:
Velad, estad firmes en la fe; portaos varonilmente, y esforzaos. 1a de Corintios 16:13. Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor firmes, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano. 1a de Corintios 15:58.
La Palabra del Señor insta a los hijos y a las hijas de Dios Creador a permanecer firmes. Esto quiere decir, expresa Destellito, que nunca sabrá si está realmente firme en la fe si no hay circunstancias que lo demuestre. El pino milagroso demostró que estaba tan arraigado que las olas no pudieron derribarlo, lo mismo sucederá con aquellos que tienen sus raíces profundas en la fe, no habrá lucha o dolor que tenga las fuerzas para desarraigarlo de los caminos hermosos del Señor. Los hombres de la ciudad japonesa intentaron salvar al pino y no fue posible, aunque resistió, de todos modos a los pocos meses murió. Dice la Biblia que los que resistan y permanezcan firmes, el esfuerzo realizado no será en vano, y no morirá como el pino milagroso, sino que habrá pasado de muerte a vida, expresó Destellito.
Autor: Oscar Olivares Dondero
Escrito para: www.destellodesugloria.org