Por fuerte que sea la tormenta…
Por fuerte que sea la tormenta…
Diversos pensamientos, emociones y sentimientos negativos, surgen en medio de la tormenta, en medio de esa crisis o dificultad que quizá puedes estar atravesando; lo primero que se nos viene a la cabeza cuando las cosas se salen de control y no se obtienen los resultados que esperamos, es que Dios nos abandonó, que nos dejó solos y realmente empezamos a sentirnos así… pero, la palabra de Dios es infalible, es viva y verdadera, pues si Él fuera mentiroso no sería Dios y sería un hombre como cualquiera de nosotros, Él no miente y lo que dice en su palabra lo cumple.
“Dios no es un simple mortal para mentir y cambiar de parecer. ¿Acaso no cumple lo que promete ni lleva a cabo lo que dice?” Números 23:19 (Nueva Versión Internacional).
Su palabra es clara, cuando le entregas tu corazón a Él, cuando aceptas a Jesús como Rey de Reyes y Señores de Señores, como tu único Salvador; Él permanecerá para siempre contigo, su Espiritu Santo te acompañará a dondequiera que vayas. No tendrás porque temer porque así estés pasando por la tormenta más fuerte Él estará contigo, y pueden haber rayos, truenos y relámpagos pero Él te defenderá y te guardará. “Cuando pases por las aguas, Yo estaré contigo, cuando pases por los ríos sus aguas no te cubrirán, cuando camines por el fuego no te quemarás y no te abrazarán sus llamas” Isaías 43:2 (Nueva Versión Internacional).
No dudes de su palabra, no dudes ni un solo instante de su Omnipotencia, Él es un Dios fiel y real y cumplirá con sus promesas; tu solamente tienes que aferrarte a Él y especialmente si estas en medio de una tormenta, pues si te dejas ganar por tus pensamientos, emociones y sentimientos probablemente te alejarás de Dios y mientras más te alejes de Él, menos sentirás su protección en medio de tu crisis.
Anímate, no permitas que la tristeza, el dolor y la angustia que puedas estar sintiendo te quiten las ganas de acercarte a Él, aférrate a la palabra de Dios, donde estés, coge tu biblia y empieza a declarar que el Señor es tu Salvador, que Él es tu roca y tu fortaleza, que con Él de tu lado, la tormenta pasará y tu obtendrás la victoria.
Jehová es mi roca, mi fortaleza y mi libertador. 2 Samuel 22:2 (Reina Valera 1960).
¡Si te aferras a sus promesas, tu fe se reafirmará y por fuerte que sea la tormenta tendrás las fuerzas para enfrentarla!
Autora: Marisela Ocampo Otálvaro
Escrito para www.destellodesugloria.org