Advertencia
Tema: «ADVERTENCIA Y RESPUESTA»
Lectura: 1 Tesalonicenses 5:1-11
Cuando una peligrosa tormenta de nieve azotó a Colorado Springs a finales de octubre del 2006, sus habitantes recibieron amplias advertencias. Los meteorólogos comenzaron a pronosticar la tormenta 36 horas antes de su llegada.
En una cálida y soleada tarde, las personas entraban como enjambres en las tiendas de comestibles para comprar suministros, mientras las tiendas de neumáticos trabajan horas extras para satisfacer la demanda de accesorios para el invierno. Todos hablaban acerca de la tormenta que se avecinaba. Incluso antes de que comenzara a caer la nieve, las escuelas y empresas anunciaron que estarían cerradas ese día. Cuando la tormenta azotó con ventiscas de nieve y temperaturas bajo cero, la mayoría de las personas estaban a salvo en casa.
Cuando aceptamos una advertencia, nuestro comportamiento cambia. Esto es cierto en cada área de la vida, incluyendo en nuestro caminar de fe. Pablo le escribió a los cristianos en Tesalónica, recordándoles que el día del Señor llegaría de manera inesperada, como un ladrón en la noche (1 Tesalonicenses. 5:2). Su llamado a la acción les advirtió de que evitasen el letargo espiritual permaneciendo alertas y con dominio de sí mismos (v.6).
El desafío de Pablo hacía eco a las propias palabras de Jesús instando a Sus seguidores a estar vigilantes y listos, «porque a la hora que no pensáis vendrá el Hijo del Hombre» (Mateo 24:44).
Si creemos en la palabra de nuestro Señor acerca de Su venida, ¿de qué manera afectará esto hoy a nuestros pensamientos y a nuestras acciones?
Reflexión: ¡Todo cristiano debe estar atento y expectante, no ser un espectador dormido!