¿A quién escuchas?
Estamos inmersos en un ambiente lleno de tanta información: en lo que vemos, escuchamos o sentimos. La Biblia dice que la Fe viene por el oír la palabra de Dios, por lo cual lo que escuchamos juega un papel importante en nuestro caminar.
En la Biblia hay una historia muy conocida, pero con mucha enseñanza. Quiero platicarles sobre David y Goliat (1 Samuel 17). Goliat desafió al pueblo de Israel diciendo lo siguiente: ¿Por qué no escogen a alguien que se me enfrente? Si es capaz de hacerme frente y matarme, nosotros les serviremos a ustedes; pero, si yo lo venzo y lo mato, ustedes serán nuestros esclavos y nos servirán (v.8b-9) NVI.
Al oír el pueblo de Israel lo que dijo Goliat se consternaron y tuvieron mucho miedo (v.11); no obstante, David actuó el Fe y venció a Goliat.
Debemos tener cuidado de todo lo que escuchamos, debemos estar alertas para guardar nuestro corazón. Sin darnos cuenta podemos caer en tristeza o temor como el pueblo de Israel.
En la vida tendremos “Goliats” que buscarán apagar nuestra esperanza, fe, amor, libertad. A veces no tendrá el aspecto a un “gigante”, sino como la serpiente con Eva, la cual pareció ser inofensiva, sin embargo, la engañó para que comiera el fruto prohibido.
El Espíritu Santo está dispuesto a enseñarnos y guiarnos a toda verdad, pero debemos pedirle el discernimiento para distinguir cuál es el origen de lo que escuchamos, saber si viene de Dios, del alma o del diablo. En Oseas 4:6 menciona que el pueblo de Israel fue destruido porque le faltó conocimiento.
Dios quiere que vivamos la vida de abundancia que Él sabe dar, pero nos pide buscarlo profundamente para poder ejercitar nuestro oído espiritual. Dios quiere llevarnos a una vida de victoria. A veces Dios permitirá circunstancias para desarrollar nuestro discernimiento, escucharemos varias opiniones y tendremos que preguntarle cuál es el origen. Si buscamos de todo corazón a Dios, Él nos guiará para tomar la mejor decisión.
No dejemos que el enemigo venga a turbar nuestro corazón, debemos emplear nuestro escudo de la Fe, y así como Jesús poder usar la herramienta de su palabra para ser más que vencedores. A veces no podremos controlar todo lo que escuchamos, pero si lo que guardamos en nuestro corazón.
En cambio, el alimento sólido es para los adultos, para los que tienen la capacidad de distinguir entre lo bueno y lo malo, pues han ejercitado su facultad de percepción espiritual.
Hebreos 5:14 Nueva Versión Internacional (NVI)
Autora: Gloria Guajardo Garcia
Escrito para www.destellodesugloria.org