Un Destellito en las manos de Dios
Continuando con su gira, Destellito Turista visitó El Salvador, con la idea de captar alguna cosa de dicho país que le pudiera servir para sus enseñanzas bíblicas. Estando allí debió comprar unos binoculares más poderosos que le permitieran apreciar mejor algunos lugares.
Destellito Turista en El Salvador
Destellito turista después de Guatemala visitó El Salvador, un país pequeño pero muy hermoso, con muchos atractivos interesantes. A Destellito le llamó la atención el lema del país: Dios, Unión, Libertad. Aparte de otros lugares, le encantó visitar El Parque Nacional El Imposible, uno de los últimos bosques secos tropicales, donde pudo ver más de 250 especies de aves, mamíferos e insectos, además de la abundante vegetación propia del lugar. Es un bosque seco tropical, en dónde se puede hacer caminatas, acampar, bañarse en ríos, y observar aves. El Parque Nacional El Imposible es una reliquia boscosa y es el último refugio de muchas especies de animales y plantas que están amenazadas o en peligro de extinción en El Salvador, explicó Destellito. Hay que destacar que esta reserva es el hogar de más de 500 especies de mariposas, 279 especies de aves y 100 especies de mamíferos, 53 especies de anfibios y reptiles, muchas de ellas amenazadas o en peligro de extinción en El Salvador. Destellito, tomó su Biblia y dijo:
La Santa Palabra de Dios dice así:
Porque que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshiciere, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha de manos, eterna, en los cielos. 2a de Corintios 5:1.
El Parque Nacional El Imposible de la República de El Salvador, es el hogar de variadas especies protegidas porque están en peligro de extinción. La Biblia dice que cuando Dios creó cada cosa que forma parte de la Tierra, vio que era bueno, y que al crear al hombre, lo hizo un poco menor que los ángeles.
La Tierra pasó a ser el hogar de todo lo creado sobre ella, sin ninguna posibilidad de extinción, sin embargo, cuando entró el pecado entró la muerte y ésta se enseñoreó sobre la creación de Dios, y la Tierra dejó de ser el refugio perfecto, explicó Destellito. Pero el Señor dejó una promesa grandiosa, que si por cualquier causa el cuerpo de los que han creído en su Nombre, muere, evitará su extinción total porque Él les tiene otro hogar, glorioso, y eterno en los cielos.
Vivir, sin tener a Cristo en el corazón como único y suficiente Salvador personal, es extinguirse, concluyó reflexivo Destellito.-
Autor: Oscar Olivares Dondero
Escrito para www.destellodesugloria.org
