El amor y el perdón de Dios
El amor y el perdón de Dios van de la mano, Jesucristo fue a la cruz y murió por ti y por mí; por amor, el mismo dijo: yo pongo mi vida por mí mismo, el mismo dijo: no hay amor más grande que el que uno de su vida por sus amigos. Jesús y Dios es nuestro amigo. Que algunos se olviden del gran mandamiento de Dios: ama a tu prójimo como a ti mismo, que algunos antepongan sus intereses personales antes de amar al prójimo, porque algunos dejaron de amar porque no los amaron, no quiere decir que tú como hijo de Dios te olvides de amar a todos sin condición.
El amor verdadero: 1ª Corintios 13:1 Si no tengo amor, de nada me sirve hablar todos los idiomas del mundo, y hasta el idioma de los ángeles. Si no tengo amor, soy como un pedazo de metal ruidoso; ¡soy como una campana desafinada! 2 Si no tengo amor, de nada me sirve hablar de parte de Dios y conocer sus planes secretos. De nada me sirve que mi confianza en Dios me haga mover montañas. 3 Si no tengo amor, de nada me sirve darles a los pobres todo lo que tengo. De nada me sirve dedicarme en cuerpo y alma a ayudar a los demás. Pablo le estaba escribiendo a un grupo de creyentes que estaban dentro dela iglesia en corinto, que habían empezado a olvidar lo que es el verdadero amor. Él les mostro que todos sus talentos, habilidades y dones espirituales; se vuelven nada si no nos amamos los unos a los otros, sin un amor desinteresado, no tenemos nada, realmente estamos vacíos por dentro, las relaciones basadas en el amor son esenciales para la restauración de tu alma y de iglesia en general.
Diccionario Bíblico: No es lo que se entiende por amar dar limosna, ser bueno, sino el amor en su significado más grande; el amor verdadero a Dios y al hombre. Es amar sin interés, los dones más gloriosos no nos sirven para nada, no son estimables a ojos de Dios. La cabeza clara y el entendimiento profundo no tienen valor sin un corazón misericordioso y lleno de amor.
Recuerda siempre lo que dijo Jesús: “Como el Padre me ha amado, así también yo te he amado; permanece en mi amor. El perfecto amor echa fuera todo temor.
Debemos amarnos: 1ª Juan 4:7 Amados hijos míos, debemos amarnos unos a otros, porque el amor viene de Dios. Todo el que ama es hijo de Dios, y conoce a Dios. 4:8 El que no ama no conoce a Dios, porque Dios es amor. La palabra es clara en decir el que no ama, escucha bien el que no ama no conoce a Dios, el mundo te conocerá y vera que el verdadero amor de Dios está en ti porque amas a tu prójimo, recuerda tenemos alrededor una gran multitud de testigos que son los que te juzgaran. Por eso el que ama de verdad no juzga a nadie, no critica a nadie y aunque le vengan a contar cosas malas de algún hermano no las repite.
9 Dios nos dio muestras de su amor al enviar al mundo a Jesús, su único Hijo, para que por medio de él todos nosotros tengamos vida eterna. Por eso la palabra dice que de tal manera amo Dios al mundo que ha dado a su único hijo, para que todos alcancemos a través de su amor el perdón, la salvación y la vida eterna, solo la sangre de Jesucristo tiene el poder para redimirnos y restaurarnos.
10 El verdadero amor no consiste en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó y envió a su Hijo, para que nosotros fuéramos perdonados por medio de su sacrificio. El verdadero amor consiste en amar a aquel que nos amado primero, Dios, Jesucristo al dar su vida por nosotros, y al espíritu santo que día a día nos ayuda a seguir adelante, tenemos que amarnos siempre, así como Dios promete amarnos eternamente.
Jeremías 31:3 Hace tiempo el SEÑOR le dijo a Israel: Yo te he amado, pueblo mío, con un amor eterno. Con amor inagotable te acerqué a mí. Y hoy en día con ese mismo amor Dios te dice: te amo pueblo mío y te amare siempre, Dios es la fuente de amor que nos llena y nos sostiene.
El perdón: Dios en su perfecto amor, nos perdonó, durante muchos años Dios nos ha estado hablando de que él es un Dios perdonador y es por eso que debemos de perdonar, el perdón es acción, que mueve el corazón, tenemos que reconocer que Dios siempre ha querido estar en paz con todo ser humano, pero lastimosamente no obedecemos a Dios, ni estamos en paz con él ni con el mundo. Pero el amor es el motor que nos mueve a perdonar.
Números 14:18 El SEÑOR es lento para enojarse y está lleno de amor inagotable y perdona toda clase de pecado y rebelión; pero no absuelve al culpable. Extiende los pecados de los padres sobre sus hijos; toda la familia se ve afectada, hasta los hijos de la tercera y la cuarta generación. Dios perdona cualquier pecado, pero cuando nosotros no hacemos uso de misericordia y del amor der Dios. O sea que no perdonamos; nuestros problemas afectan a toda la familia, y a nuestras generaciones futuras, porque el odio, la amargura y el rencor va creciendo y haciendo daño ambos y a todos los que estén en medio.
2ª Crónicas 7:14 y mi pueblo sobre el cual mi nombre ha sido llamado se humilla y ora y busca mi rostro y se vuelve de sus malos caminos, entonces yo mismo oiré desde los cielos y perdonaré su pecado y sanaré su tierra. Dios le hace una promesa al rey Salomón; una condición si su pueblo se humilla, se arrepiente de sus malos caminos, esto implica perdonar a todos por lo malo que nos han hecho, para que nuestras oraciones lleguen a Dios.
Isaías 1:18 Venid, pongamos las cosas en claro dice el Señor. ¿Son vuestros pecados como escarlata? ¡Quedarán blancos como la nieve! ¿Son rojos como la púrpura? ¡Quedarán como la lana! Dios hace un llamado para que su pueblo este a cuentas con él, él está dispuesto a perdonar nuestros pecados; no importa cuán graves sean, pero también quiere que nosotros perdonemos a nuestro prójimo, recuerda este pasaje:
Mateo 5:23 Por eso, si estás llevando tu dádiva al altar y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, 24 deja tu dádiva allí enfrente del altar, y vete; primero haz las paces con tu hermano, y luego, cuando hayas vuelto, ofrece tu dádiva. Por eso si te presentas delante de Dios y traes tu ofrenda, o vienes a presentar tus diezmos o vienes a presentar tus oraciones, primero ve y ponte a cuentas con tu hermano y luego ven y presenta tu ofrenda y tus oraciones a Dios. Es una condición que Dios pones preséntate limpio, preséntate en paz con tus hermanos y entonces Dios recibirá con agrado tus ofrendas y escuchara tus oraciones.
Algunos le dan tanta atención a las diferencias con sus hermanos; que se olvidan de buscar la verdadera restauración, hay quienes concentran sus pensamientos en recordar de como lo han tratado y se agarra de eso para justificar su conducta, ambas maneras de actuar solo entorpecen el crecimiento espiritual y hacen más lenta nuestra restauración espiritual, tenemos que crecer y madurar para aprender a perdonar. Perdonar a otros como Dios nos enseña es parte importante de la entrega de nuestra voluntad a Dios.
Mateo 6:12 Perdona el mal que hemos hecho, como nosotros perdonamos a los que nos han hecho mal. 13 Y no nos conduzcas a prueba fuerte, sino guárdanos salvos del maligno. Porque tuyo es el reino, el poder y la gloria para siempre. Amen. 14 Porque si perdonas a otros sus ofensas, tu Padre celestial también te perdonará a ti; 15 si no perdonas a otros sus ofensas, tu Padre celestial no perdonará las tuyas. Muchas veces venimos ante Dios y nos humillamos pidiendo perdón, pero para recibir el perdón de Dios debemos perdonar primero a todos los que nos han hecho daño, el verdadero perdón es importante para que seamos restaurados por el amor de Dios, muchas veces tenemos dificultad para superar el enojo y la amargura contra quienes nos hayan maltratado, sin embargo, pedirle a Dios que perdone nuestros defectos y pecados personales es hipocresía a menos que estemos dispuestos a perdonar a otros, perdemos el derecho al perdón de Dios al negarle el perdón a los demás, en nuestra restauración el no perdonar no solo es egoísta sino auto destructivo, el perdón es una acción que mueve el amor de Dios en medio de su iglesia. Porque el viene por una iglesia sin mancha y sin arruga, por una iglesia que no tenga cuentas pendientes con su prójimo mucho menos con su hermano en Cristo Jesús.
Tú no estás solo, Dios te ama y está siempre contigo.
Dios te bendiga, y que el amor del Padre, el amor de Jesucristo y la unción de su espíritu Santo este siempre contigo, en el nombre de Jesús, amen.
Jesucristo Pronto Viene
Por Hugo Leonel Orellana Martínez
Escrito Para www.destellodesugloria.org