Su pasión te dio todo
“Él fue traspasado por nuestras rebeliones, y molido por nuestras iniquidades; sobre él recayó el castigo, precio de nuestra paz, y gracias a sus heridas fuimos sanados.”
Isaías 53: 5 (Nueva Versión Internacional).
En lo personal creo que este versículo es de los más significativos respecto a la obra de Jesús y su pasión. Es un versículo el cual debemos discernir adecuadamente para comprender su poder y el acto de amor que Jesús hizo por el mundo. Cuando alguien era crucificado, este era avergonzado públicamente y la gente a su alrededor hacía mofa de ello. Pero en el caso de Jesús fue algo más. El hombre por si solo tiene naturaleza inclinada al pecado, el corazón del hombre es engañoso, digamos que en su ADN tiene maldad. Para Jesús no aplicaba esto, siendo que fue engendrado con la naturaleza divina de Dios. Y cuando Él fue crucificado
dicen las Escrituras que se hizo pecado (2 Corintios 5:21). Recibiendo el castigo de nuestras rebeliones.
Cuando Jesús le pidió al Padre que si era Su voluntad pasara de Él esa copa, la copa se refería a la ira de Dios. Por lo que en lo espiritual Él fue maldito y recibió sobre sí la consecuencia de los pecados de todos los hombres de todos los tiempos. Para que en el momento en que cualquier persona decida creer en Él, esa
persona sea salva y considerada justa a los ojos de Dios. También en lo natural, la Cruz fue el peor de los castigos. Una persona que era crucificada era quebrantada de algunos de sus huesos, sufría hemorragias, su cuerpo era traspasado con metal, su función respiratoria disminuía, y en algunos casos sufrían paros cardiacos. No obstante esto, en este versículo vemos que además Jesús fue molido, Su cuerpo fue
machacado, desfigurado, y tenía llagas en Su cuerpo. Mismas que sanan a todo aquel que crea en Jesús.
Cuando hables acerca del sacrificio y amor de Jesús en la Cruz, dimensiónale correctamente. Cree en la potestad que se le dio a Jesús sobre todas las cosas después de Su sacrificio. Pues por medio de ese sacrificio puedes recibir perdón de pecados, paz, salud, y toda necesidad que tengas. Sea lo que sea que necesites tenía un precio, y Jesús pagó ese precio.
Jesús por Su pasión ya te dio todo, créelo.
Autor: Richy Esparza
Escrito para: https://destellodesugloria.org