Temas y Devocionales Cristianos

Destellito: El Antejardín

Un Destellito en las manos de Dios.

Una tarde de domingo, Destellito detuvo su paseo por el interior de un sector poblacional, para observar a un hombre que arreglaba el antejardín de su casa. Con afán quitaba toda la maleza, o hierba que crecía entre las rosas, y otras flores hermosas. Tenía además unos árboles pequeños que en su tiempo daban flores de preciosos colores. El mantenimiento de aquel antejardín, le daba belleza y colorido a la fachada de la casa. Inmediatamente al frente, había otro antejardín, pero que estaba bastante descuidado, las flores caídas a causa de la falta de riego y negligencia, y la hierba seca, tan seca que se había tornado amarillenta, el contraste con el otro antejardín era más que evidente.

El Antejardín.-

Destellito, cuando llegó al lugar donde vivía, tomó la Biblia que estaba sobre una mesita, y la abrió para leer:

“Sécase la hierba, marchítase la flor; más la palabra del Dios nuestro permanece para siempre”. Isaías 40: 8

Las causas que provocan que la hierba se seque o que la flor se marchite, son diversas, sin importar cual, al final del proceso, han perdido todo aquello que provocaba admiración al contemplarlas, perdieron su olor, también el color, y la vida. Dice la Escritura que todo puede suceder a la naturaleza, como está pasando hoy, ejemplificándolo en su forma más simple, en la hierba que se seca y en la flor que se marchita.

Ese proceso natural de degradación no afecta a la Palabra de Dios.

La Biblia, es la Escritura eterna, es la que permanece en los tiempos de los tiempos, que cuando se acepta a Cristo Jesús como suficiente Salvador personal es escrita en el corazón de aquellos que lo han hecho. Su comprensión está al alcance de los que tienen a Jesús en su vida, no hay otro modo para entenderla. Si usted quiere leer la Biblia y entenderla claramente, debe dar el paso que cambiará su vida, abra la puerta de su corazón al Señor, expresó Destellito.-

Autor: Oscar Olivares Dondero

Escrito para: www.destellodesugloria.org