Un Destellito En Las Manos De Dios
La Atleta.
¿No sabéis que los que corren en el estadio, todos a la verdad corren, pero uno solo se lleva el premio? Corred de tal manera que lo obtengáis. 1a Corintios 9:24. Porque siete veces cae el justo y vuelve a levantarse; más los impíos caerán en el mal. Proverbios 24:16.
No cabe duda que el ejemplo de Heather es para tomar en cuenta, expresa Destellito. Si bien la caída fue violenta, no fue suficiente para minar su confianza en que era capaz de revertir la situación. De repente otro deportista se hubiera quedado en la pista desechando toda posibilidad de tener una buena llegada, sin embargo, la actitud de Heather era otra, sabía que levantarse era una oportunidad para seguir compitiendo y que si ponía todo su esfuerzo, hasta podía ganar. Y así fue.
La Sagrada Escritura no niega que el justo puede tropezar y caer, es propio de la debilidad humana, la dificultad está en que debe levantarse las veces que sea necesario, y es una dificultad porque le costará ponerse de pie, primero, debe reconocer que ha fallado, segundo, que se arrepiente sinceramente, y está dispuesto para pedir perdón, y tercero, continuar con su carrera. Y no se debe dejar pasar el asunto del premio. Todo deportista, cualquiera sea su disciplina, tiene en mente el premio, la victoria es su objetivo, traspasar la meta, o llegar a ser un campeón. La Palabra de Dios Creador, insta a los creyentes a correr de tal manera, que no tenga ningún otro objetivo que llegar y obtener el triunfo, “corred de tal manera que lo obtengáis”, ¿Cuál es la manera? , siendo fiel al Señor, amando y guardando su Palabra, y presentar fiera batalla a la tentación. La clave del correr cristiano es no apartar su mirada de la meta que tiene por delante, recuerde el ejemplo que ha dejado Heather, señala finalmente Destellito.
Autor: Oscar Olivares Dondero
Escrito para: www.destellodesugloria.org