JESÚS CALMA LA TORMENTA
Una noche tormentosa, mientras estaba acostada en mi cama, me puse a leer la Biblia, y me encontré con esta asombrosa historia, que una vez más me hizo erizar la piel al pensar e imaginarme esta situación.
El Señor Jesús iba viajando con sus discípulos en una barca por el medio del mar, cuando de repente se desato una gran tormenta, tan grande que la barca comenzó a hundirse, los discípulos temblando de miedo, desesperados porque pensaban que no iban a poder salvarse de esa gran tormenta, acudieron al Señor Jesús, y le gritaron: ¿Maestro, no te importa que nos ahoguemos?
Y… ¿Sabes que hizo Jesús? Se levanto con todo poder y gloria, y le dijo al viento -Shhhhh- y el viento enmudeció, le dijo al mar -Shhhhh- y el mar se cayó, solo un aliento de su boca, solo una palabra fue necesaria para callar al bravo mar, y al impetuoso viento.
Oh cuán grande es nuestro Dios, cuan poderoso es nuestro Señor, pareciera, muchas veces, que nos olvidamos de este atributo de nuestro Señor, el es Todopoderoso, y no hay nada imposible para él.
“Porque para Dios no hay nada imposible” Lucas 2:37 (NVI)
Quizás en este momento de tu vida, estés pasando por una gran tormenta, un momento de dificultad, de dolor, de enfermedad, quizás estés sintiendo miedo, desesperanza, y sientes que esta tormenta nunca termina, todos pasamos por esas tormentas en nuestras vidas, pero hay algo hermoso en lo que puedes pensar… Para nuestro gran Dios no hay nada imposible, el puede callar a la tormenta mas grande.
Quizás muchas veces miraste al cielo y gritaste – ¡Señor! ¿No te importa lo que me pasa? ¿No te importa que este triste, que este enfermo/a? ¡Señor! ¿No te importa?…
Amigo, quiero decirte, que a Dios si le importa lo que le pasa a sus hijos, el no está durmiendo, el quiere que lo llames, pero no dudando, más bien con fe. Acércate hasta el trono de su gracia y suplícale que calme esa tormenta por la que estas pasando, si se lo pides creyendo, con fe, él le dirá a tu tormenta: -Shhhhh- y tu tormenta callara porque para nuestro Dios no hay nada imposible, el puede calmar nuestras tormentas. Descansa en Dios, de Él, vendrá tu Salvación.
“Invócame en el día de la angustia; yo te librare y tú me honraras” Salmos 50:15 (NVI)
¡INVOQUEMOS AL DIOS TODOPODEROSO, QUE PUEDE CALLAR NUESTRAS TORMENTAS!
Autora: Mayra Noelia Garay
Escrito para www.destellodesugloria.org