Un Destellito en las manos de Dios.-
Desodorante Ambiental.-
Reparó Destellito desde su lugar de observación, que sorpresivamente uno de los enfermos, tomando un fragante desodorante ambiental, comenzó a esparcirlo al interior de la sala, estaba en eso, cuando hizo ingreso una enfermera para detenerlo. El paciente, sorprendido, hizo intento de explicar la razón de porqué lo hacía, pero enérgicamente la enfermera le explicó que estaba totalmente prohibido usar desodorante ambiental en las salas de los pacientes enfermos, ya que disimulaba los olores reales, necesarios para el personal médico y paramédico para una mejor atención. Habiendo sido testigo Destellito de esta situación, se puso a pensar, y cuando lo hacía, su cabeza brillaba intensamente, por lo que tuvo que abandonar el lugar de observación para no ser sorprendido.
La Biblia dice lo siguiente, expresó Destellito, en Marcos 7:6, “Respondiendo él, les dijo: Hipócritas, bien profetizó de vosotros Isaías, como está escrito: Este pueblo de labios me honra, más su corazón está lejos de mí”.
El Señor Jesucristo, demanda autenticidad en los creyentes, señaló Destellito. ¿Se puede fingir, por ejemplo, amar?, la Palabra de Dios dice que sí en Romanos 12:9, “El amor sea sin fingimiento. Aborreced lo malo, seguid lo bueno”.
Sucede que hay hijos o hijas de Dios, que como la historia referida, intentan disimular que sus obras son malas, o que ocultan que están enfermos espiritualmente, rociando “desodorante ambiental” para que nadie se dé cuenta, mostrando un buen olor que es engañoso.
Los últimos tiempos que estamos viviendo, están demandando de los creyentes una vida cristiana verdadera; una buena parte de la incredulidad del mundo, se debe a que en la practica no es así, dijo Destellito colocando carita de pena. El nuevo nacimiento es real, la vida nueva es real, y la vida abundante en Cristo Jesús, también es real. Hay que aceptar el consejo bíblico de despojarse de todo el pecado que asedia a los creyentes, recurrir al Abogado que tienen ante Dios Padre, para pedir perdón, y permitir que el Espíritu Santo complete la obra que inició en cada uno, terminó de hablar Destellito.-
Autor: Oscar Olivares Dondero
Preparado para: www.destellodesugloria.org