Suave susurro
—Sal y ponte de pie delante de mí, en la montaña. Mientras Elías estaba de pie allí, el Señor pasó, y un viento fuerte e impetuoso azotó la montaña. La ráfaga fue tan tremenda que las rocas se aflojaron, pero el Señor no estaba en el viento. Después del viento hubo un terremoto, pero elSeñor no estaba en el terremoto. 12 Pasado el terremoto hubo un incendio, pero el Señor no estaba en el incendio. Y después del incendio hubo un suave susurro. 13 Cuando Elías lo oyó, se cubrió la cara con su capa, salió y se paró a la entrada de la cueva. Entonces una voz le dijo:—¿Qué haces aquí, Elías?. 1 Reyes 19:11-13
Generalmente las manifestaciones especiales de Dios eran acompañadas con señales como viento fuerte, terremoto o fuego y Elías esperaba sin duda a Dios en ellas, pero Dios más bien se le manifestó con un suave susurro (o brisa suave), a menudo Dios encuentra al creyente en una situación nueva o de manera distinta a la que éste espera.
Podemos sentir la presencia de Dios de distintas maneras, podemos estar con júbilo y sentirlo, y así como en la calma y serenidad también Él nos llena de su paz.
Lo importante es sentir Su presencia, que ella nos acompañe a donde quiera que vayamos, porque su Santo Espíritu es quien nos ha sellado para su venida, preguntémonos si realmente ¿estamos caminando con la presencia de Dios?.
En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa. Efesios 1:13
Autora: Kari Gazo
Escrito para www.destellodesugloria.org