No pierdas tu elasticidad mental
Nadie echa vino nuevo en odre viejo: los odres se hacían con la piel de la oveja o de la cabra, cocían la piel y por el pescuezo esa piel se transformaba en un odre. El odre pierde elasticidad con el tiempo, y el vino nuevo fermenta, hincha el odre viejo y lo rompe y se echa a perder el vino y el odre.
El vino nuevo: son los sueños de Dios que te los va a meter “por el pescuezo” y los guardará dentro de tu corazón. Esa palabra te presiona, porque son las promesas. Promesas de sanidad, de multiplicación, de progreso. Esa palabra “te molestará”, dirás: “tengo que prosperar, tengo que avanzar, porque guardo la promesa y quiero más”.
El odre es la mente: por eso no tenes que envejecer mentalmente, el problema no es la palabra ni el sueño, sino la mente. Nos secamos, porque perdemos elasticidad, a los odres viejos para hacerlos elásticos le pegaban con un palo.
Hay que Estirarse: es prestar atención. Por ejemplo, la televisión está hecha para llamar la atención para estupidizar a la gente. Toda nuestra cultura está basada en la distracción (prendemos el celular, conversamos durante el mensaje). PERO LA MENTE SE ESTIRA PRESTANDO ATENCIÓN.
Está la generación de los nativos digitales que nacieron con lo visual, nosotros nacimos con la lectura de los cuentos. Nos distraemos leyendo la biblia, porque estamos acostumbrados a prestar atención no más de 5 minutos.
La Palabra de Dios te va a presionar el cerebro: todo tu problema está en que no te “estiras; dice la Palabra que “la tierra será llena del conocimiento de Dios”. Todo lo que Dios hace es para estirar mi fe, a Dios no le importa el viaje, el trayecto, el objetivo de Dios es estirar nuestra fe, que creamos por más. La tierra produce al 30%, al 60% y al 100%, no hay buena tierra con 30%. Se empieza con 30, luego pasamos a 60 y alcanzamos el 100, empezás de abajo, estiras la fe para creerle a Dios por 60, ahora vas por más hasta donde te de la fe. Ejemplo de Jorge Müller, que atendió un Orfanato con 2.100 chicos y le llegaban millones de dólares y los alimentaba cada día, él se movía por fe. Aprendió a creerle a Dios por 10 dólares hasta llegar a millones, el objetivo de Dios no es el sueño, es que crezcamos un poco más en la fe.
Nuestra manera de pensar es aprendida: todos nuestros miedos, nuestra manera de comunicarnos, nuestra manera de vestirnos, la aprendimos de la cultura, somos gente producto de la cultura. El primer mensaje que Jesús trajo, fue que el reino de los cielos se acercaba. ¿Qué es el reino de Dios? el reino de Dios es como Dios piensa. Es decir, Jesús vino para traernos el pensamiento del cielo a nosotros, para que nosotros pensemos como Dios piensa, eso nos hace ser «normales pero distintos». Y Dios va a trabajar en nosotros durante toda la vida, para sacarnos todos los pensamientos religiosos, los pensamientos culturales, los pensamientos tontos que tenemos, Dios los va a sacar, para él ponernos sus pensamientos y que nosotros seamos «gente del reino».?Cuando uno se hace un ciudadano del reino, no evangelista, no religioso, sino del reino de Dios, la manera de pensar de Dios, entra a funcionar en ti, y al cielo lo trajiste a la tierra, a tu propia vida.
Tres maneras que tenemos los que somos ciudadanos del reino sobre cómo pensamos:
Puedo ser maltratado pero nunca amargado
El apóstol Pablo iba a un lugar y lo lastimaban a cascotazos, Pablo se levantaba y seguía adelante. ¿Qué tenía Pablo para que lo lastimen a cascotazos y se levantase? Porque Pablo nunca dejó que nadie le amargue su corazón. Vas a ser maltratado, pero nunca permitas que eso amargue tu corazón, porque de tu corazón van a salir las fuerzas para volver a levantarte y alcanzar tu sueño, podrán tirarte todos los misiles, de hecho te van a maltratar, pero nunca dejes que la amargura, entre dentro tuyo.
Puedo poseer sin ser poseído
Quiere decir que nosotros tenemos que aprender a soltar las cosas, porque las cosas no se aman, se usan, y las cosas tienen un ciclo de vida. Las cosas son dadas por Dios para usarlas y disfrutarlas, cuando Dios te de un reloj, autos, dinero, nunca te enamores de eso, decile: “gracias Señor, lo voy a disfrutar, lo voy a cuidar, pero yo te lo entrego, para que cuando salga de mi vida no me duela, te lo doy ahora, porque cuando salga vendrá algo mejor”. Cuando el diablo viene y dice: “voy a tocar tu dinero, tu trabajo, tu familia”, le dices: “llegaste tarde, ya se lo regalé al Señor, y si tienes algún problema, métete con él que te venció en la cruz”.
Puedo pasar por problemas pero no quejarme
Dice el Salmo 23: » Jehová es mi pastor nada me faltará» Nada, nada, nada ¿Cuánto? Nada. “el bien y la misericordia me seguirán todos los días de la vida». Cuando voy a la casa de mi amigo, llegué con el bien y la misericordia, cuando me tomo el colectivo el bien y la misericordia viajan conmigo, el bien y la misericordia te siguen todos los días de tu vida. Deja de quejarte; la gente de reino hablamos fe.
Jesús dormía en la popa, el lugar del capitán. ¿En qué lugar duerme Cristo en tu vida? si él es el capitán: tranquilo ante el problema, es ahí cuando Dios está estirando tu odre, no es que te lo mandó el diablo, él te está preparando para ganar otra batalla. Dios no va a cambiar el afuera, si primero no está la paz dentro tuyo.
Autora: Silvia Truffa
Escrito para www.destellodesugloria.org
