Temas y Devocionales Cristianos

¡Beneficios de la muerte de Cristo! – Bosquejo

¡BENEFICIOS DE LA MUERTE DE CRISTO!

la-cruzMATEO 27: 51-56 

INTRODUCCIÓN: ¿Cuáles son los BENEFICIOS de la muerte y crucifixión de Cristo? O ¿En que nos hemos BENEFICIADO por Su muerte?

1. Acceso directo a la PRESENCIA de Dios  (Mateo 27: 51-56)

a. El VELO del templo EXCLUÍA  la entrada al lugar Santísimo

El velo (gr. katapétasma) era una gruesa cortina que dividía el lugar Santísimo (se manifestaba Dios especialmente) del lugar Santo. El pueblo podía entrar al patio, los sacerdotes podían entrar hasta el lugar Santo y sólo el Sumo Sacerdote tenía acceso al lugar Santísimo (una vez al año), llevando la sangre de un cordero sacrificial. Estas normas eran iguales tanto en el Tabernáculo, como en el Templo. Si el velo excluía a la gente del lugar Santísimo, era simbólicamente de que el pecado excluye a los pecadores de la presencia del Dios Santo (Isaías 59: 2; Romanos 3: 23)

b. El velo RASGADO simboliza que Cristo ABRIÓ el camino a la presencia de Dios

 “Así que, hermanos, teniendo libertad para ENTRAR en el Lugar Santísimo por la SANGRE de Jesucristo, por el camino nuevo y vivo que él nos ABRIÓ a través del velo, esto es, de su carne,  (Hebreos 10: 19, 20). Ahora debemos entrara Su presencia con corazón sincero y fe (Hebreos 4: 16; 10: 22). De hecho entre las señales asombrosas que acompañaron la muerte de Jesús estaba precisamente este gran suceso del velo “rasgado” (gr. sjízo: partir, dividir, cortar, abrir, romper) en dos de arriba abajo (Mateo 27: 51; Marcos 15: 38; Lucas 23: 45)

2. Anuló el ACTA de los decretos, quitándola y clavándola en la cruz (Colosenses 2: 12-14)

Decretos (gr. Dogma): ley, edicto, acta, cargos

Acta (gr. J(k)eirógrafon): algo escrito a mano (quirógrafo), documento o bono legal, manuscrito y era el término que se usaba como pagaré (con puño y letra del deudor) en el que alguien reconocía su deuda o un compromiso de pago (era el documento de deuda en  contra nuestra como deudor de Dios: era una sentencia de culpabilidad). Según Pablo consistía en ordenanzas, mandamientos, preceptos y estatutos de la ley Mosaica (Efesios 2: 15) y esto estaba en contra de nosotros, ya que la Biblia enseña: “que por medio de la le y es el conocimiento del pecado y todos hemos pecado” (Romanos 3: 20, 23)

Anular (gr. Axaleífo o exaleípho): de “ex” (fuera)y “aleipho” (untar): enjugar, borrar, cancelar, lavar,eliminar, frotar para borrar, perdonar el pecado (fig.) y se usa metafóricamente para significar también una supresión u obliteración, ya sea de pecados (Hechos 3: 19), de un decreto (Colosenses 2: 14), un hombre (Apocalipsis 3: 5) o de lágrimas (Apocalipsis 21: 4).

Este documento quedó ANULADO (invalidado) y privado de su fuerza legal (exigirnos el pago de la deuda), cuando Cristo murió en la cruz como nuestro sustituto y pagando así nuestra deuda. La Palabra enfatiza que la QUITÓ de en medio (gr. Aíro: elevar, alzar, cargar, llevar cargando, tomar, expiar el pecado lo suprimió y quitó de nuestra vista), pues pendía enfrente nuestro como un cartel acusador y la CLAVÓ (gr. Proselóo: ensartar) en la cruz. ¡Sus clavos dieron también muerte a la ley que era nuestro adversario! (Gálatas 3: 13).

3. Cristo GANÓuna victoria en la cruz (Colosenses 2: 15)

Triunfando (gr. thriambéuo): “llevar en procesión” (DHH). Hacía alusión a la costumbre de aquel tiempo: cuando el rey volvía victorioso, después de una batalla llevaba a sus prisioneros de  guerra en su desfile de triunfo por la ciudad, para mostrar o exhibir (NVI) a todos la gran victoria que había ganado; el pueblo aplaudía y quemaban especies aromáticas

“Triunfando sobre ellos en la cruz” (vr. 15) significa también que Cristo “venció” al morir en la cruz, desarmar (NTV),  despojar. “Él venció a todos los poderes y fuerzas espirituales a través de la cruz, desarmándolos y obligándolos a desfilar derrotados ante el mundo (PDT). ¿Contra quién venció, triunfó Cristo en la cruz?

a. Contra los PRINCIPADOS y potestades (vr. 15a)

Alusión a los poderes del mal, fuerzas espirituales demoniacas, poderes satánicos en el mundo, autoridades y poderes espirituales (DHH), seres espirituales que tienen potencia y autoridad. Los poderes del mal fueron los prisioneros en el desfile victorioso de Cristo. ¡En la cruz Cristo luchó y ganó! Analicemos los detalles:

En la cruz Cristo les quitó las armas y también el uniforme (desarmados y desnudados) de su dominio, autoridad y poder sobre el pueblo redimido que reconoce que Cristo es el Señor (del dominio que ejercían sobre nosotros)

Fue una exhibición pública: los expuso a la vergüenza pública (la derrota de los poderes espirituales). Sin embargo; la lucha espiritual continua (Efesios 6: 12

b. Contra SATANÁS y sus demonios (Hebreos 2: 14, 15)

Jesús “destruyó” por medio de Su muerte al que “tenía” (vr. 14) (gr. Éjo – sjéo: retener abusivamente lo que no le pertenece) el imperio de la muerte; el diablo (vr. 15). Destruir (vr. 14) (gr. Katargeo): incapacitar, quitar su poder (anular legalmente), estar enteramente inmóvil (inútil), invalidar, quitar, suprimir, reducir a impotencia. ¡Por medio de la muerte de Cristo se destruyó (incapacitó) al diablo! (1 Juan 3: 8). Librar (vr. 15) (gr. Apalásso): cambiar de lo que era, dejar en libertad, remover, arreglar

La victoria de Cristo ya había sido anunciada con anticipación por el mismo Dios: “Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar o talón (Génesis 3: 15). Herir (hb. Shuf): quebrantar, aplastar (PDT), golpear (NTV). ¡Cristo venció! (Apocalipsis 5: 5)

4. Cristo nos REDIMIÓ (Gálatas 4: 3-5)

Redimir (gr. Exagorázo): comprar, pagar, rescatar de pérdida (mejora la oportunidad) 

a. Redimidos de la esclavitud del pecado (Romanos 6: 17, 18)

Porque éramosesclavo del pecado (Juan 8: 34). En los tiempos de Cristo había muchos esclavos que se compraban o vendían como propiedad. Los cuales eran considerados como posesión de su dueño. Tenían que trabajar duramente, sin sueldo y muchas veces eran maltratados, sin derechos y sin reclamar. Su única esperanza era comprar su libertad, pagando una suma grande de dinero a su dueño. El Nuevo Testamento tuvo en cuenta esta costumbre para ilustrar lo que Cristo hizo en la cruz para redimirnos (rescatarnos o comprarnos) de la esclavitud espiritual (pecado) y con precio de sangre; Su sangre:

b. El precio de nuestra redención fue la sangre de Cristo

Esto se refiere más que nada a Su muerte y sacrificio en la cruz. De hecho vino al mundo para dar Su vida en rescate por muchos (Mateo 20: 28; Juan 10: 11). Por eso La Biblia enfatiza: Sabiendo que fuisteis rescatados (gr. lutróo o lútron: redimir, pagar un rescate, soltar, precio de redención) de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, (el rescate que Él pagó) no con cosas corruptibles, como oro o plata,  sino con la SANGRE preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha (gr. Áspilos: sin defecto, sin macula) y sin contaminación (gr. Áspilos) (1 Pedro 1: 18, 19).

“Y cantaban un nuevo cántico, diciendo: Digno eres de tomar el libro y de abrir sus sellos; porque tú fuiste inmolado (gr. Sfázo: matar en sacrificio, masacrar, mutilar, herir, crucificar) y con tu SANGRE  nos has redimido (gr. Exagorázo: comprar, pagar, rescatar de pérdida, pagar el rescate) para Dios, de todo linaje y lengua y pueblo y nación (Apocalipsis 5: 9)

¿Cuáles son los Propósito de haber sido redimido o comprado con Su sangre?

Él nos compró con Su sangre o nos rescató de la esclavitud y ahora pertenecemos a Él como nuevo dueño. ¡Somos libres de la esclavitud espiritual del pecado y por lo tanto le servimos a nuestro nuevo dueño!

5. Llevó el CASTIGO de nuestros pecados (1 Pedro 2: 24)                                                                                                                                                                                                                                                        

Llevó (gr. Anaféro): llevar la responsabilidad, las consecuencias, la pena, la culpa o el castigo del pecado, tomar arriba. En la cruz Cristo LLEVÓ el castigo del pecado y por eso queda satisfecha LA JUSTICIA de Dios y como consecuencia o resultado Dios ahora puede PERDONAR los pecados arrepentidos, sin infringir en ningún momento Su propia ley justa. Por eso, pudiendo ahora perdonar, queda satisfecho el AMOR DE DIOS.

a. Este acto de Cristo que QUITÓ la ira justa de Dios contra nuestro pecado y el mal, tiene un nombre especial en la Biblia (PROPICIACIÓN): quitar el pecado (Romanos 3: 25; 1 Juan 2: 2; 4: 10). El hecho de que Cristo estuvo dispuesto a morir por nosotros en PROPICIACIÓN por nuestros pecados es muestra de Su grande amor  (1 Juan 4: 10). En resumen, la muerte de Cristo no sólo tiene consecuencias hacia nosotros (Él nos puede perdonar, limpiar, salvar). Sino también tiene consecuencias hacia Dios (quitando Su ira justa contra el pecado humano) 

b. Si Cristo PAGÓ la pena de nuestros pecados (creyentes convertidos), la ley de Dios tampoco debe acusarnos de nuestros pecados: ahora quedamos ante la ley de Dios como si nunca hubiéramos pecado y ahora la ley divina no nos considera como pecador, sino como JUSTOS (Romanos 3: 24, 28; 5: 1). ¡Este es el propósito divino: “Vivir a la justicia” (1 Pedro 2: 24)

La palabra JUSTIFICADO (tratado como justo por Dios) que Pablo usa aquí describe la situación legal delante de Dios, del pecador salvado (declarado inocente). Significa también que ahora tenemos paz para con Dios y cuando nos presentamos ante Dios en oración, Dios nos mira como si nunca hubiera pecado. Aunque nuestro carácter no sea perfecto todavía (lo será en los cielos)

La costumbre decía: “si el criminal pagaba la pena quedaba ante la ley como si no hubiera cometido ese crimen: ahora la ley no lo considera como criminal. Aun si otro pagaba la multa por el criminal tampoco debían tomarlo preso otra vez por el mismo delito: habiéndose pagado la pena (quien quiera que sea), el criminal queda ante la ley como si no hubiera cometido ese crimen y ahora la ley no lo considera como criminal”

6. Padeció para LLEVARNOS a Dios (1 Pedro 3: 18) 

a. Para este cometido fue suficiente un solo y único sacrificio y para siempre (Hebreos 9: 12, 26, 28) del justo por los injustos: sufrió el castigo que correspondía a nosotros.

b. El propósito de Cristo en sufrir por nuestros pecados es llevarnos a Dios. Llevar (gr. Proságo): guiar, hacia delante, conducir cerca, citar, presentar, acercarse, presentar, traer  (abrir nuevamente la comunión entre Dios y los pecadores arrepentidos). “Cristo sufrió(padeció: gr. Pásjo o padso o péndso: experimentar una sensación o impresión dolorosa, sufrir) por nuestros pecados una sola vez y para siempre. Él nunca pecó, en cambio, murió por los pecadores para llevarlos a salvo con Dios. Sufrió la muerte física, pero volvió a la vida en el Espíritu (1 Pedro 3: 18) (NTV) 

CONCLUSIÓN: ¿valió la pena el sacrificio de Cristo por la humanidad? ¡AMÉN QUE SÍ!

Autor: PrediCantor Garys Leandro

Preparado para: www.destellodesugloria.org