El Ogro
Cuenta la historia ¿? de un remoto pueblo que en las espesuras del bosque habita un Ogro muy malo, que mata y come a las personas y que todo aquel que entra en el bosque y se encuentra con él, encuentra la muerte, es por eso que nadie del pueblo se atreve a entrar al bosque por miedo y temor a morir.
Un día un joven que venía caminando de regreso hacia su casa en aquel distante pueblo, perdió el rumbo de su camino por la prisa que llevaba y como empezaba a oscurecer tenía miedo a perderse y se perdió, entonces comenzó a caminar más rápido, luego comenzó a correr pero por la oscuridad de la noche se perdió mas y mas cuando se dio cuenta se había metido a aquel tenebroso bosque, y comenzó a llorar porque su miedo era tan grande que temía encontrarse con aquel fiero, malo y asesino Ogro.
Caminando en la densa oscuridad se sentó a llorar su lamento entonces se hizo fuerte y de repente se apareció un hombre alto y con voz suave le dijo: ¿qué te sucede amigo porque lloras? A lo que el repuso: Es que me he perdido y me han dicho que en este bosque habita un hombre muy malo y sanguinario que mata y se come a las personas, entonces el hombre dijo: Mientras yo esté aquí no dejare que nada te suceda, yo te defenderé de ese hombre malo y perverso ven conmigo te llevare a mi casa y mañana temprano te ayudare a llegar a tu casa, y el joven confiado se fue con aquel hombre, caminaron aproximadamente como una hora en el espeso bosque y cuando el joven escuchaba algún ruido se asustaba y aquel hombre alto le decía: No temas yo estoy contigo dice Jehová de los ejércitos el nos guarda de todo mal, al llegar a la casa del aquel hombre le dijo: Pasa, ponte cómodo te traeré algo de comer y aquel hombre empezó a cocinar un conejo que tenia y luego de un rato dijo: Listo ven comamos porque yo tengo mucha hambre, aquel hombre le dio estofado de conejo, un poco de frijoles, pan y café caliente, después de comer el joven aquella suculenta cena quedo satisfecho y dijo: Gracias buen hombre si no fuera por usted hoy estaría yo muerto devorado por ahí por ese hombre perverso, le debo la vida, el hombre contesto: No mi amigo a mi no me debes nada dale gracias a Dios porque yo nunca paso por ese camino pero por la densa oscuridad de esta noche hoy también yo me perdí y me desvié un poco de mi camino, pero cuando te encontré y me contaste que en el bosque había un hombre perverso pedí a Dios que me guara de regreso a mi casa y el nos traído sanos y salvos.
El hombre le dijo: durmamos y mañana temprano te llevare a tu casa, muy de mañana se despertó el joven atraído por un exquisito aroma a leche caliente, se levanto y fue hacia la cocina y el hombre le dice: qué bueno que ya despertaste, lávate y comamos, y en la mesa había frijolitos fritos, huevos revueltos, pan caliente y un gran vaso de leche tibia y aquel joven al terminar de comer dijo: gracias mi buen amigo usted a sido realmente una buena persona a pesar de no conocerme me a tratado como alguien de su familia, el hombre dijo hace 5 años mi esposa y mis hijos enfermaron gravemente y murieron me quede solo, por un tiempo estuve viviendo solo, amargado, peleando con todo el mundo pero cuando Jesús vino a mi vida todo eso se fue y todo cambio ahora vivo aquí solo con mi Cristo y muy feliz, me alegra haberte podido ayudar, espero que de vez en cuando me visites.
Luego el hombre tomo al joven y en todo el camino le compartió de la palabra de Dios, luego de 15 minutos aquel joven llego al pueblo y muy agradecido lleno de emoción le abrazo y le beso y le dijo: Gracias buen hombre por todo lo bueno que hizo por mi, por cierto me llamo Juan Romero y usted amigo, el hombre grande contesto mucho Justo Juan, me llamo Ogro Martinez
Aquel joven se quedo perplejo por un momento no supo que decir y le dijo: Dios te bendiga quiero recibir a Jesus como mi señor y Salvador me ayudas a hacerlo y aquel hombre oro con él y el joven se fue muy contento y lleno de gozo en su corazón por haber recibido a Jesus, pensó yo estoy muy mal y si Dios cambio a este hombre me puede ayudar a mi.
Aprendió que uno no debe de ponerle orejas a chismes, murmuraciones y malos comentarios en contra de otras personas. No te dejes llevar de chismes ni rumores a Dios no le agrada, si no lo viste y no lo escuchaste mejor no lo repitas y no comentes nada con nadie
Aquel joven visitaba seguido al Ogro y se hicieron grandes amigos y él y toda su familia conocieron el mensaje de salvación de Jesús el hijo de Dios a través del Ogro.
Hoy en día sucede lo mismo, juzgamos, opinamos y criticamos a muchas personas por lo malo que nos han contado de ellos pero no nos atrevemos a hablarles y formar nosotros mismos nuestra propia opinión, nos cerramos la oportunidad de conocer tal vez a un Ogro de buen corazón.
En la palabra de Dios Jesús mimo dijo:
Mateo 7: 1-2 1 No juzguéis para que no seáis juzgados. 2 Porque con el juicio con que juzguéis, seréis juzgados; y con la medida con que midáis, se os medirá.
La misma palabra de Dios nos enseña a no juzgar a nadie, si no queremos ser juzgados de la misma manera y tal vez peor, porque el que juzga y condena es Dios, además aprendamos a conocer a las personas y luego de un tiempo sabremos si lo que dicen de ellos es verdad o no pero solo Dios tiene el derecho de Juzgar y condenar, aprendamos a no señalar a las personas porque cuando tu levantas tu dedo índice para señalar a alguien no ves los diez dedos que te señalan a ti
Mateo 7:12 Por eso, todo cuanto queráis que os hagan los hombres, así también haced vosotros con ellos, porque esta es la ley y los profetas.
Es por eso que Dios mismo dijo: ama a tu prójimo como a ti mismo haz y bien y no mires a quien pero lo que sí es cierto es lo siguiente:
Mateo 25: 37-40 37 Entonces los justos le responderán, diciendo: «Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te dimos de comer, o sediento, y te dimos de beber? 38 «¿Y cuándo te vimos como forastero, y te recibimos, o desnudo, y te vestimos? 39 «¿Y cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a ti?» 40 Respondiendo el Rey, les dirá: «En verdad os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos hermanos míos, aun a los más pequeños, a mí lo hicisteis.»
Todo lo que tú haces de bueno es para Dios mismo lo haces, lo mismo es si hacéis lo malo a Dios se lo haces al herir y lastimar a alguien de tu creación
Dios te bendiga y prospere tu alma hoy y siempre que cada día el poder de su Palabra y la presencia de su Espíritu Santo trasforme nuestro ser hasta llevarlo a la altura de varón (Hombre o Mujer) perfecto que él quiere que tengamos y que solo él puede hacer
No te dejes llevar de chismes ni rumores a Dios no le agrada, si no lo viste y no lo escuchaste mejor no lo repitas y no comentes nada con nadie
Autor: Hugo Leonel Orellana Martinez
Escrito para www.destellodesugloria.org