Por eso, ya pagaron en la Cruz
¿No estás cansado de vivir entre el sepulcro y la vida?
Recuerda que cada nuevo día que te levantas es un milagro, pues tú estabas destinado a condenación. Recuerda cómo fuiste despertado al recibir la salvación, ¿Por qué quieres seguir adormecido?
Fuimos llamados a estar llenos de gozo, a estar perpetuamente llenos del Señor. Redimido/a has sido hermano/a, entrega ya esas cadenas. Regocíjate de nuevo hermano/a, Emmanuel ya no es una promesa.
Es tiempo de crecer hermano/a, ya has tratado muchas veces de construir tu vida en cimientos de sepulcro. Es tiempo de construir tu vida en cimientos de resurrección.
Bien sabes qué eso, ha puesto un velo en tu gozo. Y esa vida a medias; simplemente no es vida. ¿Por qué no quieres de nuevo habitar en esos ríos de agua viva? , Ese placer momentáneo de tu carne está robando la vida de tus días; ¿Qué no lo vez?
Ese placer momentáneo en la carne está causando un corto circuito en tu alma y espíritu, bien sabes que el Señor te lo ha mostrado. Por más que lo has intentado, ese placer no ha podido coexistir con tu espíritu, porque donde hay muerte se escapa la vida.
Ya es tiempo de rendirse, ya es tiempo de creerle. Creer que aunque por el momento exista dolor al mutilar tu carne; recibirás esa vida que anhelas.
Y no te estoy hablando de ponerte en ayuno del placer, que tantas veces has intentado; estoy hablando de extirpar ese tumor que impusieron en tu alma. Esa infección que contrajo tu alma hace mucho tiempo. El Señor sabe que has sido una victima de las circunstancias, El Señor ha visto tu impotencia ante ello, por eso hoy ofrece extirpar eso por ti; si así lo quieres.
Pide al Señor tu Padre, que te de el arrojo necesario para pedirle ese favor. Pide al Señor tu Padre que te ayude a rendirte en sus brazos. Pide al Señor tu Padre que tome en cuenta eso que hoy le entregas. Pide al Señor tu Dios que te de el espíritu necesario para pelear con tu ser, si se amotinaré contra ti. Pide al Señor tu Dios que te permita ver el galardón.
Recuerda qué por eso, ya pagaron en la Cruz.
Autor: Richy Esparza
Escrito para www.devocionaldiario.com en Septiembre de 2009