ESTANDO EN UN LUGAR SEGURO
Salmos 91:1
Este día ha sido bastante fuera de lo común en nuestro país El Salvador, ya que una ola de violencia se ha desatado de tal manera que las denominadas maras o pandillas paralizaron el comercio, casi en su totalidad, de un país completo.
Ante la realidad que muchas veces los cristianos nos exponemos, porque tal y como la biblia lo dice somos pasajeros y advenedizos en este mundo pero hemos de padecer lo que este mundo padece, por lo tanto estamos expuestos a cualquier situación difícil que pueda ocurrir.
La verdad es que es muy difícil el decir que no se tiene temor de lo que pueda ocurrir pero venia a mi mente una palabra que cientos de personas lo portan en una billetera, una cartera, en cuadernos, en separadores, tras las puestas de las casas, en un sin fin de objetos que puedan portar como un “amuleto de la buena suerte”, es el salmo 91:1.
Los cristianos tenemos la cualidad de poder mantener la seguridad que Cristo nos ofrece, pero muchos de nosotros no comprendemos que para gozar de esa seguridad hay un gran requisito que debemos de cumplir, dice la palabra de Dios “El que Habita al abrigo del Altísimo” esto es un requisito de existencia crucial en la vida de los cristianos.
¿Quieres estar seguro que estas seguro? Sencillo, debes de habitar bajo la protección del Todopoderoso.
Habitar es un término que esta definido en la Real Academia como permanecer en un lugar, al mismo tiempo una de las acepciones jurídicas de esta palabra es que para habitar en un lugar debo de demostrar mi amino de querer estar en ese lugar.
¡Wow! ¡Eso es una palabra poderosa! ¿Quiere René Pleitez habitar bajo el abrigo del Altísimo y morar bajo la protección del omnipotente?
René Pleitez podría contestar que está ansioso por hacerlo, pero ¿el Altísimo y Omnipotente Rey soberano lo cubrirá?
La respuesta a esta pregunta la encontramos en algo que suena sencillo pero que es muy difícil, el señor Dios Padre nos aceptará que podamos vivir bajo su protección en todo sentido y momento de nuestra vida, si y solo si (como el símbolo matemático) estamos dispuestos a hacer lo que el nos manda a hacer,
Nadie dará su cobertura a menos que esta persona se encuentre bajo sus estatutos y reglas.
Dios quiere darnos la protección y guardarnos de todo mal y peligro y está bien que puedas retomar la palabra del salmo 91, pero es necesario el requisito indispensable que querer habitar y morar con Dios.
Somos llamados a confiar plenamente en que Dios nos guarda y manda sus ángeles a que acampen al rededor nuestro para protegernos, pero para que esa escolta celestial pueda activarse debemos de procurar andar como Jesús anduvo y hacer lo que Jesús Hacía.
En mi trabajo soy encargado de seguridad como parte de mis funciones del departamento jurídico y comentaba con el dueño de la empresa de seguridad que cada uno de nosotros podíamos usar un seguridad si lo deseábamos, a lo que le respondí que no era necesario porque Dios me cuidaba, esa convicción debo de aunarle el hacer la voluntad de mi Padre para que la escolta celestial sea delegada a mi cuido,
Lo que quise decirte en este devocional es que Dios quiere cuidarte en todo momento de tu vida, en cualquier situación en la que te encuentres, pero es necesario retribuir ese cuidado que Él tiene para con nosotros con un poco de obediencia.
DIOS TE BENDIGA GRANDEMENTE Y CUIDE TU ENTRADA Y TU SALIDA, MANDE ANGELES QUE TE PROTEJAN DE TODO MAL A TI Y TU FAMILIA SIEMPRE, SE LES APRECIA EN GRAN MANERA Y SE LES AMA EN EL SEÑOR.
Autor: Rene Pleitez
Escrito para www.devocionaldiario.com