TEMA: «PASOS HACIA UNA VERDADERA FELICIDAD» (PARTE IV)
TEXTO: MATEO 5: 6
Que bueno es comprender que la verdadera felicidad no depende del dinero, lo material, el placer y
el vicio, sino de seguir los principios de la palabra, en ella encontramos que:
- Son felices los que reconocen su necesidad espiritual.
- Son felices los que desahogan sus cargas (lloran) ante Dios.
- Son felices los que saben gobernar su carácter frente a las asperezas de los que le rodean.
Hoy examinaremos la siguiente bienaventuranza:
«Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia por que ellos serán saciados»
1. SON FELICES LOS QUE TIENEN UN PROFUNDO DESEO DE DIOS.
1.1. El hambre y la sed son dos necesidades básicas en el ser humano.
1.2. El hambre y sed representan el profundo deseo del cuerpo humano.
1.3. El hambre y sed representan una profunda necesidad.
1.4. El hambre y la sed por lo general nos impulsa a buscar el alimento.
1.5. Uno de los hombres en el Antiguo Testamento que anhela profundamente de Dios fue: David. En el Salmo 63 el lo exclama.
1.6. El hambre y sed que expresa San Mateo 5:6 es espiritual.
1.7. Al decir hambre y sed de justicia, no se refiere a que se haga justicia humana frente a un agravio, sino al contrario, esa palabra «justicia» tiene que ver con la justificación espiritual que Jesús declara para el pecador. Es la que nos lleva a tener paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo. (Romanos 5:1)
1.8. Esta hambre fue la que manifestó Nicodemo al buscara Jesús aun de noche, la que manifestó Zaqueo cuándo se subió al árbol, la que invocó el ladrón junto a Jesús.
1.9. La respuesta de Jesús es: «Saciarnos», o sea, darnos completa satisfacción interna como la que dijo David: «Como de grosura y de meollo será saciada mi alma». (Salmo 63:5) .
CONCLUSIÓN:
La oferta de Jesús a los hambrientos y sedientos hecha en Isaías 55:1-6 sigue abierta. Lo bueno es que es una oferta: UNIVERSAL (a todos) voluntaria (venid) gratuita (sin dinero) accesible (comprad) y completa (se deleitará vuestra alma con grosura)