¿Qué Necesitas Para Actuar?
Si hay un sediento, ¡dale de beber! Y si algún hambriento, alimenta y sacia su hambre. Cuando veas al desnudo, vístelo y al descalzo cálzale los pies. Ser pregonero de las buenas nuevas es responsabilidad de cada cristiano apasionado. No esperes que alguien lo haga por ti. Porque no es tarea tan solo del pastor, misionero, cantante, evangelista o diácono.
Ser luz y llevar su palabra es nuestra encomienda. Inundar de amor a las almas es mandato divino. Haz lo que puedas, todo lo que este a tu alcance hacer. No tienes que ser extraordinario o una persona fuera de lo común, solo simplemente estar dispuesto y ser valiente.
No busques visitar un continente, cuando a tu lado vive gente que necesita que los alientes. No pretendas mover grandes masas, sin invadir antes, el corazón de los de tu casa. Vivimos soñando y queriendo hacer cosas grandes y no nos percatamos que en lo pequeños detalles y cuidados se marca la diferencia. Comienza con tareas pequeñas y de repente te encontrarás, respondiendo a los desafíos menos imaginados y grandes.
¿Quién te dijo que tú no podías ser un héroe de las huestes de Cristo? Ten fe y mucha iniciativa, pon manos a la obra. Recuerda que Dios se agrada de los humildes y de quienes siempre están dispuestos, sin importar cuán alto sea el precio. Es menester de todo aquel que quiera impactar al mundo, rendirse a los pies de Cristo, aceptar su llamado y actuar.
Levántate que ya es el tiempo, no tardes más en ejecutar la acción y el llamamiento. La mies es mucha y los obreros pocos. Se tú el obrero que abre caminos para que otros pasen y conozcan a Dios.
Autora: Brendaliz Avilés
Blog: https://escritosdelsilencio.blogspot.com/