Tema: «Aun cuando piensas que nadie te ama, Dios en verdad te ama»
Texto: Cantares 2: 4
Y su bandera sobre mí fue amor”
Cantar de los Cantares es un pequeño libro poético en donde muestra una similitud de Cristo con la Iglesia, a través de los versos que en el se encuentran. En esta ocasión quise tomar esta porción porque encierra una gran verdad y me reconforta el saber que su bandera sobre mi es amor.
Cuando andábamos perdidos en nuestros delitos y pecados, nadie daba nada por nosotros, estábamos destinados a una muerte eterna, pero Cristo vino y nos saco del lodo cenagoso, del pozo de la desesperación y convirtió lo que estaba sin valor, en algo valiosos, en pocas palabras elimino de nosotros el hambre que teníamos de conocer la verdad, y esto lo hizo a través de llevarnos al banquete de su casa.
Sin duda la Palabra de Dios es un banquete para nuestra vida, pues a través de ella podemos comprender la perfecta voluntad de Dios para con nuestra vida, pero el banquete mas grande estará en las bodas del cordero que están preparadas para todos aquellos que vivan santamente y anhelen estar junto al Maestro.
Lo mas lindo desde mi punto de vista de este versículo es la segunda parte que dice así: “Y su bandera sobre mí fue amor”, no hay duda que cuando Cristo nos saco de la vida de pecado, no solo nos ofreció un banquete, sino que la bandera suya fue de amor sobre nosotros, pues se necesitaba tener amor para vernos necesitados y hambrientos de El.
La bandera simboliza pertenencia, y cuando habla que su bandera sobre nosotros fue de amor esta diciendo que El no permitirá que nada malo nos pase, porque nos ama, pues el nos amo primero a nosotros, antes que entendiéramos su propósito para nuestra vida el ya nos amaba.
A veces he querido poder comprender el amor de Dios para conmigo, pero es difícil de entender, mas aun cuando nosotros mismos no amamos a los que nos rodean, es por eso que nos es difícil entender como es posible que aun con nuestros errores y defectos Dios nos haya amado y rescatado de las garras del infierno.
Pero mas allá de poder comprender lo grande y hermoso de su amor, no hay mas palabras que poder inventar para decirlo lo mucho que estamos agradecidos por habernos sacado del pecado, habernos pues un banquete delante nuestro y declarar que somos pertenencia suyas a través del amor con el que nos amo.
Amigo mío, posiblemente hallan personas en este mundo que te demuestren que no te aman o a lo mejor te lo han dicho y dichas palabras han dañado tu corazón a tal punto de que esas palabras suenan aun en tu mente y no puedes ser libre de eso. Yo quiero decirte en esta hora, que aun cuando nadie me ame, aun cuando todos me desprecian y digan cosas que quieran dañar mi corazón mi vida no depende de ellos, es mas no estoy hasta este momento acá por ellos, sino que estoy por Dios, porque el me amo cuando nadie me amo, porque me dio vida cuando estaba muerto, porque me dio un verdadero sentido a mi existir, porque aun cuando he sido infiel, El ha permanecido fiel y me ha extendido la mano cuando todos la encogieron, cuando todos no daban nada por mi, el dio su vida con amor y nunca se quejo de eso, es por eso y mas que ahora no tiene que importarte el hecho de que muchos te desprecien, pues si Dios te ama, ¿Qué mas podemos pedir?
El amor de Dios no lo podemos medir, pero si lo podemos sentir en nuestra vida cada día y eso nos hace mantener un gozo que nada ni nadie nos lo supo dar, es por esa razón que vale la pena luchar cada día por tratar de agradar a aquel que un día agrado nuestra vida cuando dábamos todo por perdido.
Que lindo es saber que Dios me ama, pero más lindo saber que su bandera de amor me alcanzo.
Autor: Enrique Monterroza
Escrito para: https://reflexionesydevocionales.blogspot.com