Temas y Devocionales Cristianos

Presiones que amenazan a la Familia

TEMA: «PRESIONES QUE AMENAZAN A LA FAMILIA»

TEXTO: 1º SAMUEL 8:1-5

leyendo-la-biblia2INTRODUCCION:
En la historia humana, nunca como hoy se habían sentido tantas presiones sobre la familia. La corriente de este mundo es completamente opuesta al sentir que debe gobernar a la familia.
Debemos definir bases claras y fuertes para que nuestra familia no sea influenciada negativamente, sino que seamos nosotros los que influenciemos a todos los que nos rodean.

Examinemos algunas presiones que amenazan a la familia:

I. LA PRESION DE LAS COMPRACIONES (1º Samuel 8:1-5)

a) La necesidad humana básica de aceptación, agravada por el tenemos a ser rechazado, induce a adoptar estilos de vida que son incompatibles con lo que enseñan las escrituras.
b) Israel pidió rey porque querían ser igual a todas las naciones, esto les condujo a consecuencias fatales.
c) Cada miembro de la familia debe tener sumo cuidado de no tomar decisiones por causa de la presión de los demás.
d) Este deseo de comparación se nota cuando los miembros de la familia se sienten desafinados por el medio y quieren ajustarse a las costumbres y formas sociales de los demás.
e) Hay jóvenes que le dicen a Papá y… ¿Qué tiene de malo? Todos lo hacen.
f) La presión se nota en vestuario, vocabulario, costumbres. Etc.

II. EL ESCAPISMO (Sal. 55:6-8)

a) Vivimos en sociedad escapista. Considero que esto se debe al trasfondo familiar en que fuimos formados.
b) Todos en determinado momento nos hemos visto ante la tentativa de huir, pero el detalle no está en las ganas de escapar, sino en lo que haré para no hacerlo.
c) El escapismo puede darse de muchas maneras: APATÍA, AISLAMIENTO, INDIFENCIA, NO ENFRENTAR LAS RESPONSABILIDADES, ETC.
d)
Existen medios escapistas como el alcohol, el cigarrillo, la droga, los tranquilizantes, etc.

CONCLUSION:
¿Qué hacer ante estos dos monstruos que amenazan a la familia?

1. Reconocer lo que somos en Jesús. En el estamos completos (Col. 2:10)
2. Reconocer que existe un dulce refugio en Cristo Jesús (Jeremías 16:19)
3. Permitir que Jesús reine y edifique nuestra familia (Salmos 127:1)

Autor: Pastor Walter Valle