Tema: «NO REMES»
Lectura: Efesios 3:14-21
Ole Evinrude no era un holgazán, pero entendía los límites del poder humano. Cada día empleamos maquinaria para lograr realizar las tareas de la vida. Pero a menudo tercamente ponemos nuestra confianza en nosotros mismos cuando estamos tratando de servir a Dios. En Efesios 2, el apóstol Pablo escribió acerca de una mejor manera de hacerlo: «Que os conceda, conforme a las riquezas de Su gloria, ser fortalecidos con poder por Su Espíritu en el hombre interior» (v.16).
En vez del esfuerzo personal, Pablo instó a los creyentes a encontrar fuerza en «Aquel que es poderoso para hacer todo mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que obra en nosotros» (v.20).
¡No remes! Recibe el poder de Dios y úsalo.
Reflexión: Podemos hacer lo que sea que Dios quiera que hagamos si dependemos de Su poder para hacerlo.