Reflexión: Subir o bajar

Un Destellito En Las Manos De Dios

subir o bajarInternet, expresa Destellito, da para todo, sin embargo, hay cosas de mucho provecho que se pueden utilizar como fundamento para enseñar. Les contaré la siguiente historia publicada. Según estudiosos, en el mundo existen diez escaleras francamente aterradoras, entre ellas, los escalones del Observatorio de Mont Blanc, o Monte Blanco, se trata de uno de los montes más elevados de Europa, y su ubicación es compartida por Francia e Italia, y que se encuentran en la cima de la montaña, sin embargo, hay otra escalera que también es impresionante. Se trata del Pailón del Diablo, ubicada en la República del Ecuador, país de América del Sur, y cuya capital es San Francisco de Quito, sus peldaños se construyeron junto a las cataratas, y se hicieron con cantos de rodado de gran tamaño, que provocan poca tracción al caminar sobre ellos, además del inconveniente que se tornan resbaladizas, existe una barandilla de metal que también permanece mojada y reviste poca seguridad.

Subir o Bajar

Oh Jehová, hiciste subir mi alma del Seol;  me diste vida, para que no descendiese a la sepultura. Salmos 30: 3.  ¿Quién subirá al monte de Jehová?  ¿Y quién estará en su lugar santo? . Salmos 24: 3

Cuando se habla de una escalera, inmediatamente el pensamiento la une a la idea de subir o bajar. En los dos ejemplos dados se requiere de mucha valentía y dominio propio subir o bajar por ellas, resulta temerario hacerlo. Para subir por la escalera de la fe, se necesita confianza. Es la forma de alcanzar la cima del monte de las circunstancias, de los dolores, de los duelos, o de las amarguras,  y de todo aquello se representa un desafío como hijo o hija de Dios Creador, a enfrentar y vencer, declara con seguridad Destellito.

La pregunta: ¿Quién subirá al monte de Jehová?, la deben contestar los que han puesto su esperanza firme en Aquél que fue a la cruz. Es notable que para encontrarse con el Señor, el escritor inspirado menciona el monte de Jehová. Ello significa que hay que subirlo, y no es fácil subir una montaña, porque pueden presentarse una serie de obstáculos, que procurarán impedir la llegada a la cumbre. La escalera de la fe hay que apoyarla sobre las faldas de la montaña, y por muy empinada que quede, Él, desde arriba le estará animando a pisar el primer peldaño para comenzar a subir. No se detenga en los males que le ha tocado sufrir en estos días, tenga confianza, y desde luego, comience a subir.

Autor: Oscar Olivares Dondero

Escrito para: www.destellodesugloria.org

COMPARTE


Ahora puedes comentar con tu cuenta de Facebook: