Un pastor de verdad
UN PASTOR DE VERDAD
A la hora de evangelizar o compartir la palabra de Dios, es usual encontrar personas reacias a creer que tanta divinidad sea verdad y sobre todo que pueda existir un Pastor que esté dispuesto a amar y ayudar a las personas de una manera incondicional. Lo que yo hago en un caso como estos, es presentar a mi Pastor y demostrarles que lo que les digo no es una fantasía o una falsa ilusión, pues mi Pastor es un Pastor de verdad. Las siguientes son sólo algunas de sus maravillosas virtudes:
Un Pastor de verdad, se sacrifica: Yo soy el buen pastor. El buen pastor da su vida por las ovejas, Juan 10:11 (NVI).
Un Pastor de verdad, perdona: Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad, 1 Juan 1:9 (RV1960).
Un Pastor de verdad, ama: Traten a todos con amor, de la misma manera que Cristo nos amó y se entregó por nosotros, como ofrenda y sacrificio de olor agradable a Dios, Efesios 5:2 (DHH).
Un Pastor de verdad, provee: El Señor es mi pastor, nada me falta, Salmo 23:1 (NVI).
Un Pastor de verdad, guía: Me guía por sendas de justicia por amor a su nombre, Salmo 23:3 (NVI).
Un Pastor de verdad, protege: Aun si voy por valles tenebrosos, no temo peligro alguno porque tú estás a mi lado; tu vara de pastor me reconforta, Salmo 23:4 (NVI).
Un Pastor de verdad, es tierno: Como un pastor que cuida su rebaño, recoge los corderos en sus brazos; los lleva junto a su pecho, y guía con cuidado a las recién paridas, Isaías 40.11 (NVI).
Un Pastor de verdad, es misericordioso: Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad, Lamentaciones 3:22-23, (RV1960).
Un Pastor de verdad, enseña sólo la verdad: Yo soy el camino, la verdad y la vida, le contestó Jesús. Nadie llega al Padre sino por mí, Juan 14:6 (NVI).
Un Pastor de verdad, tiene como principal propósito agradar a Dios: Mi alimento consiste en hacer la voluntad de Dios, quien me envió, y en terminar su obra, Juan 4:34 (NTV).
Hermano(a) no importa cuántas cosas puedes estar afrontando, quiero que sepas que aferrado(a) de la diestra de Jesucristo el Salvador y Redentor de la humanidad, puedes superar cualquier situación por más difícil que sea. Si tienes tu confianza puesta en Él, te aseguro que su respaldo nunca te faltará y no es porque yo lo diga, es porque Él es así, Él no falla, Él no miente, Él es fiel.
¡Mi Pastor es un Pastor de verdad, su Nombre es JESUCRISTO de quien dependo, a quien miro, a quien sigo y a quien sirvo!
Autora: Marisela Ocampo Otálvaro
Escrito para www.destellodesugloria.org
