Cinco oraciones bíblicas que nos enseñan cómo hablar con Dios

CINCO ORACIONES BÍBLICAS QUE NOS ENSEÑAN CÓMO HABLAR CON DIOS

1- La oración de Ana por un hijo (1 Samuel 1:10 – 16): el corazón roto por su incapacidad para concebir un niño (y atormentado por una rival que se burlaba de ella por eso), Ana se volvió a Dios en oración tan intensamente que el sacerdote que la veía pensó que estaba ebria: “… ella con amargura de alma oró a Jehová, y lloró abundantemente”, v. 10; Dios contestó la oración de Ana y su hijo Samuel vino a ser uno de los grandes profetas de Israel.

2- La oración de confesión de Daniel (Daniel 9:1 – 19): el pueblo de Dios había pecado y estaban bajo Su juicio. En lugar de culpar a Dios, excusarse o simplemente desesperarse, el profeta Daniel en su lugar expresó una de las oraciones más conmovedoras de arrepentimiento recordadas en toda la Biblia: “Y volví mi rostro a Dios el Señor, buscándole en oración y ruego, en ayuno, cilicio y ceniza. Y oré a Jehová mi Dios e hice confesión diciendo: Ahora, Señor, Dios grande, digno de ser temido, que guardas el pacto y la misericordia con los que te aman y guardan tus mandamientos; hemos pecado, hemos cometido iniquidad, hemos hecho impíamente, y hemos sido rebeldes, y nos hemos apartado de tus mandamientos y de tus ordenanzas. Oh Señor, conforme a todos tus actos de justicia, apártese ahora tu ira y tu furor de sobre tu ciudad Jerusalén…”.

3- Habacuc se regocija (Habacub 3): la oración del profeta Habacuc es tanto un canto de alabanza y una petición por misericordia, es la imagen perfecta de un creyente reconociendo el poder de Dios al mismo tiempo que pide sinceramente que ese poder defienda a los hijos de Dios de las dificultades: “Aunque la higuera no florezca, ni en las vides haya frutos, aunque falte el producto del olivo, y los labrados no den mantenimiento, y las ovejas sean quitadas de la majada, y no haya vacas en los corrales; con todo, yo me alegraré en Jehová, y me gozaré en el Dios de mi salvación. Jehová el Señor es mi fortaleza, el cual hace mis pies como de ciervas, y en mis alturas me hace andar”.

4- Josafat ora por liberación (2 Crónicas 20:5 – 12): enfrentando una abrumadora fuerza de enemigos decididos a destruirlos, el rey Josafat clamó a Dios en una oración donde reconocía todo Su poder, y suplicó en ella la intervención de Dios. Su declaración de cierre: “No sabemos qué hacer, y a ti volvemos nuestros ojos”, v. 12, podría ser el lema de cualquier cristiano frente a los cambios o los desafíos.

5- La oración del Señor (Mateo 6:9 – 13): ¿hay alguna oración más sencilla y completa que la propia oración de Jesús? Oró pidiendo que sus discípulos supieran cómo orar; Jesús demostró cómo orar con una oración modelo que es característicamente concisa y memorable.

Autora: Alma Delia Ponce

Escrito para www.destellodesugloria.org

COMPARTE


Ahora puedes comentar con tu cuenta de Facebook: