Mi propósito debajo del sol – Reflexiones

Mi propósito debajo del sol

Así cómo una cría de águila descubre su propósito cuando su madre le empuja fuera del nido y usa sus alas para no morir y volar; así cómo un velero descubre que solamente por medio del viento tendrá el poder para avanzar a su destino, así cómo un pedazo de madera solamente descubre su forma real después de ser expuesto al filo de la navaja, de la misma manera solo hasta que entreguemos todo miedo al Señor y decidimos tomar la identidad de Cristo podremos usar nuestras alas para volar. De la misma manera solo hasta que entendamos que el Espíritu Santo es nuestro motor y que él sustenta la obra de Dios, solo así llegaremos a nuestro destino. Y solamente hasta que resistamos el calor del fuego y el filo de la navaja al desprendernos de nuestra carne, tendremos entendimiento de la obra maestra que somos en las manos de nuestro Creador.

El Dios Altísimo busca lo ordinario para hacerlo extraordinario, pero lo que activa y sostiene esta transformación es la fe. Del tamaño de tu fe será la gloria con la que serás transformado.

Simón escuchó de parte de Dios que él había sido creado con un propósito mayor que solo amontonar pescados, sino que había sido llamado a ser Pedro el pescador de hombres. (Mateo 16:18). La diferencia de Simon a Pedro se llama fe. O cómo Saulo el asesino de Cristianos aquél que respiraba amenazas y muerte contra los discípulos del Señor (Hechos 9:1) se convirtió en Pablo el instrumento escogido de Dios (Hechos 9:15) , pero para ello Saulo tuvo que creer en el amor y misericordia de Dios para llegar a ser Pablo el autor de la mayoría de las cartas del Nuevo Testamento.

Al igual que Simón descubrió que él había sido llamado a algo más que a amontonar peces, nosotros hemos sido llamados a algo más que amontonar dinero, prestigio o reconocimiento. Hemos sido llamados a tener verdadera llenura viviendo el propósito por el cual hemos sido creados.

Así cómo un teatro se estremece cuando dicen ¡arriba el telón!, así cómo un shofar se sabe poderoso cuando es tocado para la batalla, así cómo un guerrero aumenta los latidos de su corazón conforme se aproxima al campo de batalla, de la misma manera nosotros solo nos sentiremos verdaderamente vivos cuando el poder del Espíritu Santo nos recorra usándonos para Su propósito.

Existe solamente un propósito por el cual has sido creado y ese propósito solo lo conocerás por medio de Dios al entregarle totalmente tu vida. Podrás tener un sin numero de éxitos en tu vida, tal vez tus cuentas bancarias estén desbordando dinero, quizás tengas una hermosa familia….pero, si no cumples tu propósito en la generación que te ha tocado vivir, habrás fracasado debajo del sol.

“Ciertamente David, después de servir a su propia generación conforme al propósito de Dios, murió, fue sepultado con sus antepasados, y su cuerpo sufrió la corrupción.”

Hechos 13:36 (Nueva Versión Internacional)

En este versículo se resume toda la vida de David, todas sus hazañas, sus conquistas, sus innumerables salmos, todas las riquezas que juntó. Todo se resume en que cumplió el propósito de Dios, y después de hacerlo fue enterrado. Por eso la importancia de qué conozcas y vivas el propósito para el cual fuiste creado.

El día de hoy te invito a que levantes una oración al cielo y recibas instrucción de parte de tu Creador para vivir tu verdadero propósito debajo del sol. Y así, transmitas de Su vida.

Autor: Richy Esparza

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